Ángel López de la Mota, alto cargo designado por Francisco Álvarez-Cascos cuando era ministro de Fomento, fue quien ordenó predeterminar la adjudicación de contratos del gestor aeroportuario, Aena, a empresas de la "trama Gürtel", según declaró ante la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional la empleada que tramitaba esos expedientes.

De la Mota está imputado, junto a José María Gavari, por cohecho y prevaricación por haber recibido supuestamente de "Gürtel" de 2000 a 2002 "dádivas en efectivo y especie" a cambio "de la adjudicación a empresas de Francisco Correa de contratos de Aena", el gestor aeroportuario dependiente de Fomento, coincidiendo con la etapa al frente del Ministerio de Álvarez-Cascos, al que los investigadores de la UDEF llegaron a identificar semanas atrás con las siglas "PAC" que la trama corrupta atribuía en sus cuentas a uno de los perceptores de comisiones.

La testigo, cuya identidad responde a las iniciales E. P. F., acusó el pasado 11 de marzo ante los agentes de la UDEF al exdirector de comunicación López de la Mota, a quien los informes del sumario sobre la red de Francisco Correa señalan como presunto preceptor de unos 60.000 euros mediante viajes y reformas en su vivienda.

La trabajadora manifestó a la Policía que, "a finales de 2000", mientras se preparaba la adjudicación del stand de Aena para la Feria de Turismo del año siguiente, López de la Mota le dio "indicaciones para que recibiera a representantes de Special Events" y después se "le marcó como objetivo" que "fuera la adjudicataria" la empresa de Correa, que al final percibió por ese contrato 45 millones de pesetas (unos 270.000 euros), según informa "El Mundo".

Sobre el modus operandi, E. P. F. dijo a la UDEF que "la única manera de controlar el proceso era establecer unos criterios de adjudicación ambiguos y difusos" para que "preponderaran los factores subjetivos a la hora de valorar las ofertas presentadas" con el fin de que "los elementos de idoneidad, originalidad, adecuación a los objetivos perseguidos por la compañía, diseño innovador y otros tuvieran peso suficiente para decidir la adjudicación".

El trámite administrativo se adaptó a esos criterios y De la Mota se encargó de evaluar los proyectos y de otorgar a Special Events la mayor puntuación, según la testigo, quien añadió que "la oferta técnica" presentada por la empresa de la "trama Gürtel" era "deficiente". Durante su testimonio ante la Policía, E. P. F. dejó claro que el pliego de condiciones se redactó para que la empresa adjudicataria fuera la de Francisco Correa y ninguna otra.

Después, el exdirector de Comunicación ahora imputado llegó a justificar que no se hubiese recurrido a trámite el concurso público por "un retraso de toma de decisiones". Este sistema de actuación "se extendió en el tiempo" e incluso llegó "a ser mucho más notorio", según aseguró la empleada a los investigadores. Otro directivo de Aena, José María Gavari, a quien la Policía señala también como posible perceptor de sobornos, habría participado asimismo en la supervisión de las adjudicaciones a dedo.

"La entrada de Francisco Correa se correlaciona temporalmente con el nombramiento de Cascos", declaró E. P. F. a los investigadores. Cabe recordar que el cabecilla de la trama corrupta había afirmado ante el juez Baltasar Garzón que "Paco Cascos, con el que yo tenía cierta relación, me dio la cuenta de Aena y era una prenda muy importante". En cuatro años Correa llegó a facturar 2,4 millones de euros. Ahora el juez Pablo Ruz ve indicios de delito en los contratos de Aena con "Gürtel".