Una monarquía federal "es la solución", pilotada por un rey, Felipe VI, "que ya no está detrás del burladero". Dice Pilar Urbano, autora del polémico libro "La gran desmemoria" sobre el 23-F que ayer presentó en la librería Cervantes, en Oviedo, que España necesita "una monarquía más de pantalón vaquero y menos de salón del trono, con poder para escuchar, pero no sólo a los de arriba. Quiero ver a Felipe y Letizia en los conciertos de rock duro, haciendo senderismo o comprando en Zara".

Cataluña, Urdangarín, las cacerías de elefantes, la salud... Todo influyó en la abdicación, dice la escritora y periodista (Valencia, 1940). "Una abdicación nunca es voluntaria". Juan Carlos I se había "distraído" de sus funciones "y lo hizo en plena hondonada de la crisis, en pleno duelo de despensa y bolsillos. Además, el quebranto físico le impide presencia y representación".

El debate monarquía o república está en la calle, un tanto pendiente desde la Transición "cuando lo que se debatía era democracia o dictadura". ¿Qué opción ganaría en un referéndum hoy? "Ni me lo planteo. Sería ilegal, y esto no es la ley de la jungla". A la Constitución hay que pegarle un repaso, dice: la ley electoral, la prevalencia del varón, la distribución territorial de España... "En su día la Constitución fue aprobada con prisas y con miedo, con los militares tirando de espuela detrás. Desde entonces la sociedad ha cambiado en muchas cosas".

Con la abdicación de Juan Carlos I, "el Príncipe evita achicharrarse bajo los focos, con esa presencia muda y elegante, pero sin funciones" que ha tenido hasta la fecha. El balance del reinado de Juan Carlos I "es positivo con penumbras hasta la 'operación Armada'". El protagonismo que Urbano concede al Rey en la trama civil del 23-F generó muchas reacciones contrarias. El hijo de Adolfo Suárez pidió la retirada del libro "cuando ni lo había leído". Actuó por encargo de la Zarzuela", asegura.