El exvicesecretario Carlos Floriano reconoció ayer al menos un pago al conseguidor de la trama corrupta "Púnica", Alejandro de Pedro, que le ofreció sus servicios para mejorar la imagen de los líderes del PP. Nieves Alarcón, esposa del exconsejero madrileño Francisco Granados, aseguró ante el juez que este personaje trabajaba ya para la Comunidad de Madrid cuando su marido entró en el Gobierno de Esperanza Aguirre.

En su declaración como imputada, Alarcón dijo que Granados habló con De Pedro para ver cómo podían mejorar su reputación en internet, pero rechazó que fuera su esposo quien introdujo a De Pedro en la Comunidad de Madrid, aunque la exconsejera de Educación Lucía Figar, también imputada, manifestó que conoció al conseguidor en la sede del PP, "en una charla organizada por Granados".

El propio De Pedro admitió sus contactos con miembros del PP, entre ellos Floriano, al que dijo, no obstante, que no había vuelto a ver desde hace dos años. Floriano reconoció que el conseguidor se ofreció a la dirección nacional para mejorar la "reputación" de sus líderes, aunque después de un periodo de prueba, por el que recibió 5.000 euros más IVA, "no se le contrató". El dirigente conservador respondía así a las informaciones según las cuales hubo una conexión entre De Pedro y destacados cargos de su partido, en concreto con él mismo, según las grabaciones de los interrogatorios.

"Después de toda la cantidad de personas que estoy oyendo, mi sensación es que en la época de su marido dos personas de un pueblo tan grande como Valdemoro se han llevado el 80% del mercado inmobiliario, que son David Margaliza (socio de Granados) y (Ramiro) Cid Sicluna", le dijo el instructor a Nieves de Alarcón.

El empresario José Luis Huerta, de Waiter Music, negó haber hecho "amaños" con Granados y haber hinchado los contratos con ayuntamientos de Madrid para la organización de las fiestas con el objeto de repartirse el dinero con alcaldes y el PP. Relató que su relación con Granados se remonta a cuando éste llego a la Alcaldía de Valdemoro, municipio al que llegó a facturar más de 4 millones (la Guardia Civil dijo que fueron nueve). "No facturaba a esas empresas antes, y a partir de que entra Granados sí que factura, es por lo que me da la sensación de que se han ayudado ustedes", le espetó el juez.