El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha salido a comer a los alrededores del Congreso de los Diputados tras la sesión de Pleno extraordinaria que se celebraba en la Cámara Baja para aprobar el tercer rescate a Grecia.

El líder del Ejecutivo ha salido andando y acompañado del portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, y, durante el trayecto hasta el restaurante, se ha encontrado con numerosos ciudadanos que han querido acercarse a él y saludarle personalmente. "Suerte, presidente", le han gritado. Rajoy se ha acercado a ellos y no ha dudado en hacerse selfis, una imagen atípica del presidente.

El encuentro, en un clima relajado, se centró en intercambiar impresiones sobre el verano y el nuevo curso político, y tuvo como plato fuerte los torreznos y los cogollos de Tudela propios de la cervecería.

Y mientras el presidente y la cúpula del grupo parlamentario comían fuera del Congreso, los oradores del PP en ese debate parlamentario, el ministro de Economía, Luis De Guindos, y el portavoz económico del grupo, Vicente Martínez Pujalte, comían juntos en la cafetería de la Cámara.