El Gobierno español y la Embajada de Israel reprobaron ayer el veto impuesto por el Festival Rototom de Benicasim al cantante Matisyahu, al considerarlo una discriminación por su condición de judío y "una forma de actuar que violenta la conciencia". Matisyahu fue retirado del cartel tras no querer pronunciarse sobre el derecho del pueblo palestino a tener un Estado propio y sobre el uso de la violencia.