El homenaje al guardia civil langreano Juan Carlos Beiro, asesinado en Leiza en 2002 por la explosión de una pancarta-bomba, estuvo este año cargado de electricidad. María José Rama, la viuda del agente, no pudo soportar la presencia de la presidenta foral navarra, Uxue Barkos, y le afeó que se apoye para gobernar "en quienes justifican a ETA" , al tiempo que calificó la acción de la jefa del Ejecutivo de "ejercicio de cinismo". Rama leyó un comunicado en el que llamó la atención sobre la presencia en el homenaje, celebrado anteayer, jueves, de "personas que hasta hoy" jamás se habían acercado a Leiza.

Ya el saludo entre ambas fue muy frío. María José Rama saludó con desgana a la navarra y eludió mirarla a la cara. Finalizado el homenaje, Barkos se acercó a Rama y le espetó: "Yo tengo la conciencia muy tranquila", a lo que Rama respondió: "Y yo mucho más, yo duermo todas las noches...". Barkos añadió: "Tú me has interpelado y yo te respondo. La dignidad de este Gobierno está en que estamos aquí".

La Presidenta mostró ayer su "respeto" a lo expresado por la viuda, si bien añadió que fue una crítica "injusta". "Se nos invitó", indicó Barkos, y añadió que irá a todo homenaje a las víctimas al que se le convoque.