Las candidaturas independentistas, Junts pel Sí y la CUP, obtuvieron el 63,73% de los votos emitidos por los catalanes en el extranjero, pero esta victoria no tiene consecuencias en el reparto de escaños en el Parlament y, por lo tanto, la lista de Artur Mas sigue con 62 diputados y la de los anticapitalistas con 10.

De los 196.062 catalanes censados en el extranjero, 21.771 solicitaron la documentación para poder votar, pero sólo 14.781 lo hicieron. Del total de votos emitidos, 7.894 fueron para Junts pel Sí y 1.526 para la CUP.

De esta forma, Mas sigue necesitando el apoyo de al menos dos diputados de la CUP, además de los 62 de Junts pel Sí, para salir investido en segunda votación, por mayoría simple. Pero los anticapitalistas rechazan la investidura de Mas y exigen otro candidato.

El portavoz de CDC en el Senado, Josep Lluís Cleries, exigió la comparecencia del ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, para "exigirle responsabilidades" por supuestas "irregularidades" detectadas en el voto exterior. La Generalitat se queja de que la junta electoral se negara a ampliar los plazos para votar por correo, pese a las denuncias de retraso en el envío de la documentación requerida a los electores.