El borrador del programa electoral del PSOE, conocido ayer, contiene más de 1.200 propuestas, pero sin duda la más polémica es la supresión de la asignatura de Religión del currículum educativo. El líder del PSOE, Pedro Sánchez, afirma que esa medida y otras centradas en la relación religión-Estado "no van en contra" de la Iglesia, sino que pretenden avanzar para que España sea un Estado laico.

Sánchez intentó explicar ayer que él no es un "radical" que persiga las creencias de nadie, pero defendió que la religión se circunscriba al ámbito privado y que el Estado "garantice la laicidad" en la educación y en las ceremonias institucionales.

Es "la prioridad política de mi generación", explicó el secretario general socialista, que propuso recuperar la asignatura de Educación para la Ciudadanía.

El líder del PSOE negó que quiera echarle un pulso a la Iglesia, que ayer se mostró visiblemente irritada, igual que el PP. Y, para demostrarlo, anunció que su intención, si llega a la Moncloa, es hacer aprobar una ley de libertad religiosa.

Además, el partido también propone retirar los símbolos religiosos de los edificios de carácter público, salvo que sean elementos estéticos o artísticos o estén en espacios de culto, y eliminar la referencia a la Iglesia Católica en la Constitución y revisar el Concordato con la Santa Sede.

Otra propuesta lanzada por los socialistas, conocida ya el lunes, es ampliar de forma progresiva, de los 16 a los 18 años, la educación obligatoria y buscar un gran pacto educativo para evitar que cada legislatura cambie la ley.

El Gobierno reaccionó ayer a esta propuesta al anunciar que está estudiando universalizar la educación hasta los 18 años para ayudar a los jóvenes a continuar sus estudios en todos los niveles educativos, es decir, hacer el bachillerato gratuito, pero sin que sea obligatorio, como propone el PSOE en su programa.

Otras medidas propuestas por los socialistas son:

Sancionar la demanda y compra de prostitución, así como el alquiler de locales como burdeles y clubes de alterne para lucrarse con la industria del sexo.

Volver a reformar la ley del aborto para que las menores de 16 y 17 años decidan, sin consentimiento paterno, si quieren interrumpir su embarazo.

Promulgar una ley de muerte digna y de cuidados paliativos.

Reforma de la Ley Electoral para que haya listas desbloqueadas y se facilite el voto electrónico y el de los emigrantes.

Endurecer la lucha contra la corrupción con medidas como prohibir la concesión del indulto a los condenados por este delito, o que los cargos públicos y funcionarios no puedan recibir regalos.

Elección en primarias de los candidatos a la presidencia de los gobiernos nacional y autonómicos y a los ayuntamientos.

Derogación de la reforma laboral.

Subir el salario mínimo a 1.000 euros en dos legislaturas.

Reforma fiscal que eleve la carga tributaria a las grandes empresas y a las personas con grandes patrimonios.

Suprimir la prisión permanente revisable y recuperar el principio de justicia universal.