El líder de Podemos, Pablo Iglesias, planteó ayer como eje de su trabajo tras el 20-D una propuesta de cambio constitucional desde el diálogo y el acuerdo para blindar los derechos sociales, el derecho a decidir, una justicia independiente, un sistema electoral proporcional y la lucha contra la corrupción.

Esas son las cinco claves en las que, según explicó al Consejo Ciudadano estatal de Podemos, quiere centrar el trabajo político de la formación en la campaña electoral -que dirigirá Íñigo Errejón- y en la próxima legislatura, para lo que ha "tendido la mano" y se ha mostrado dispuesto a "hablar con todo el mundo".

"No nos podemos conformar", dijo el líder de Podemos, formación en baja en las encuestas, para arengar a los suyos y animarles a que se dejen la piel en la campaña, para "ganar" y "cambiar" el país.

Para ello, Iglesias estimó necesarios "cinco grandes acuerdos de cambio constitucional", empezando por un "cambio democrático" que implique una modificación del sistema electoral por otro "diferente", que sea realmente proporcional. Su segunda propuesta es un gran acuerdo que blinde constitucionalmente "y de manera efectiva la independencia del Poder Judicial". "Nunca más jueces al servicio de poderes económicos y de partidos políticos", dijo.

Un tercer acuerdo estaría dirigido a blindar en la Constitución los derechos sociales: la vivienda, la educación, los derechos laborales y la sanidad. En cuarto lugar, planteó trasladar a la Constitución la lucha anticorrupción, de manera que señale que "sea imposible utilizar las instituciones para mantener privilegios y que no pueda haber puertas giratorias".

Y, por último, Iglesias citó como quinto gran acuerdo de ese cambio constitucional el "derecho a decidir". "Vamos a defender la unidad en la plurinacionalidad, pero tenemos muy claro que decidir estar en un proyecto común es algo que corresponde a la gente de manera libre", subrayó el líder de Podemos, quien aseguró que si forma Gobierno, Errejón será su vicepresidente político.