El diputado del PP Pedro Gómez de la Serna se resiste a renunciar a su segundo puesto en la lista por Segovia, pese a que ayer le pidieron que se retirara de la carrera electoral varios altos cargos del partido, empezando por la "número uno" de la candidatura, Beatriz Escudero, el presidente del Congreso, Jesús Posada, y, más veladamente, la vicepresidenta del Gobierno y el ministro del Interior.

De la Serna, que es uno de los 55 parlamentarios del PP que forman parte de la Diputación Permanente del Congreso -el único órgano que sigue activo tras la disolución de las Cortes-, ya fue apartado de la campaña la semana pasada por la dirección del partido, después de que varios medios desvelaran que él y el embajador en India, el exdiputado Gustavo de Arístegui -que dimitió ayer del cargo para no "perjudicar ni al Gobierno ni a su presidente en plena campaña electoral"-, cobraron comisiones millonarias por actuar como "conseguidores" de contratos para firmas españolas ante gobiernos del norte de África y Latinoamérica.

Tanto De la Serna como De Arístegui tienen abierto un expediente disciplinario por parte del comité de derechos y garantías del PP, y la Oficina de Conflictos de Intereses, dependiente del Ministerio de Hacienda, ha iniciado una investigación de oficio.

El sábado, el presidente del PP de Segovia, Francisco Vázquez, pidió sin tapujos a De la Serna que renuncie a la candidatura porque "está haciendo daño al partido". El mismo argumento que ayer empleó la "número uno" de la lista por esa provincia, Beatriz Escudero, quien reconoció que el caso que afecta a su compañero y a De Arístegui "está haciendo mucho daño tanto al partido como a Segovia".

Escudero confió en que De la Serna aceptara dimitir antes del "cara a cara" de anoche entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, pero al cierre de esta edición la renuncia no se había producido.

También el presidente del Congreso pidió a De la Serna su renuncia porque su permanencia en la lista "perjudica" al partido. Jesús Posada aclaró que la decisión "ya no depende" del PP, sino que "el responsable de quedarse o no en la candidatura es él y yo, desde luego, le recomendaría que lo dejara".

Además, Posada se mostró partidario de que se reforme el Reglamento del Congreso para que la Cámara pueda revisar periódicamente las compatibilidades que se conceden a los diputados para llevar a cabo tareas extrapalarmentarias.

También la vicepresidenta del Congreso, Celia Villalobos, recomendó a De la Serna que se retire, "aunque lo que haya hecho sea honesto y legal". La exministra, sin embargo, no quiso decir si la resistencia del diputado a renunciar perjudica al PP. "No soy quién para medir eso, eso lo debería medir él, como ha hecho el señor Arístegui".

Sin ambages, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, dijo que De la Serna "ya está tardando en renunciar" y el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, confesó que él sabría qué hacer si fuese el diputado por Segovia: "Sé lo que yo haría pero me lo guardo".

También veladamente, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, dejó caer en Ferrol: "Él tiene que saber cuál ha sido su actuación y actuar en consecuencia".