El ministro de Justicia, Rafael Catalá, salió ayer en defensa del diputado del PP Pedro Gómez de la Serna, distanciándose de la intensa presión de responsables del partido para que renuncie a continuar como número dos en la lista al Congreso por Segovia, Catalá aseguró que corresponde al propio De la Serna, apartado de la campaña electoral por su supuesta vinculación con comisiones a empresas, y no al PP decidir sobre su exclusión de la lista de candidatos al Congreso, por ser un asunto de carácter más ético que legal. El ministro supone que su actitud no será la de "aferrarse a ninguna posición". A su juicio, Gómez de la Serna, "no ha cometido ninguna ilegalidad", mientras que el plano de la ética queda a juicio de cada uno y "nadie puede obligarle" a renunciar a seguir en la lista.

Catalá añade que conoce a De la Serna desde hace muchos años y le tiene por una persona "honesta, profesional, con valores y principios", que estos días está sufriendo una "altísima presión" personal y de salud, por lo que cree que no va a tener una actitud "renuente de aferrarse a ninguna posición".

"El PP no le obliga a dimitir porque somos respetuosos con las normas y una persona que está en las listas como candidato solamente de el depende esa decisión de excluirse" ha insistido.

A diferencia de Catalá, en el PP siguen escuchándose las voces de quienes piden la renuncia de De la Serna. El portavoz del PP en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons, aseguró ayer que lo que votan los segovianos es a Rajoy, al igual que en el resto de España, y no a De la Serna. "El candidato al congreso de los diputados por Segovia es Mariano Rajoy", afirmó González Pons.Para el dirigente del PP, "Gómez de la Serna sabe lo que tiene que hacer. La única decisión que le queda tomar es cuándo y, cuanto más tarde, peor para él y peor para nosotros".

Entre los clientes que pudieron solicitar la mediación de Pedro Gómez de la Serna figura un empresario asturiano, según la conversación entre el diputado del PP y un exsocio que ayer hicieron pública distintos medios. En la grabación se escucha al exsocio responder al reproche de De la Serna de que no le lleva a interesados en sus tareas de mediación con otro reproche por el trato dado a uno de los candidatos. "Te traigo a uno de los empresarios más importantes de Asturias, un tío que tiene mil millones, contrastados, en el banco y nos dejas tirados frente al Congreso, en el hotel Palace". El diputado popular se excusa señalando que la cita coincidió con una votación en el Congreso. "Yo si no estoy en mi despacho, estoy en el Congreso", afirma.

Sobre esta conversación, el ministro de Justicia señaló ayer que el derecho a la información es fundamental, pero también lo son los derechos a la intimidad o al honor, por lo que, entiende, que si la difusión de esas conversaciones se considera ilegal "habría que abrir un procedimiento". Catalá señala que la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LEcrim) intenta conseguir un equilibrio entre ambos derechos, el de información y el de la privacidad personal.