El ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz, aprecia conexiones entre declarar "persona non grata" al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, como hizo este lunes el Ayuntamiento de Pontevedra, la ciudad donde se crió, y un delito de odio o, al menos, con la incitación a él.

El Ministro expresó esta opinión durante una rueda de prensa, al ser preguntado por la decisión que tomó el pleno del Ayuntamiento pontevedrés en respuesta a la decisión del Ejecutivo en funciones de conceder a la papelera Ence una prórroga para mantener su actividad en la ría durante otros sesenta años.

Fernández Díaz juzga "lamentable" la decisión del Consistorio, que, a su juicio, "ofende más a quien la realiza que a quien la padece". No es propio de una institución hacerlo con un vecino y por una discrepancia política, señaló el Ministro, para quien el Ayuntamiento pontevedrés "ni se respeta a sí mismo ni a sus vecinos".

"A lo mejor encontramos alguna conexión entre esa declaración y los delitos de odio", dejó caer entonces el Ministro, antes de aventurar que esas iniciativas pueden incitar a la violencia y al odio.

Horas antes, el propio Rajoy, en una entrevista en Antena 3, reconoció que le había "dolido mucho" la decisión tomada por el Ayuntamiento de la ciudad donde creció; más aún, puntualizó, que el puñetazo que le propinó un joven durante la campaña electoral. "Es que ni a Hitler ni a Stalin les declararon 'persona non grata' en Pontevedra, soy el único en la historia de la ciudad", protestó el líder del PP.