José Ramón Gómez Besteiro sucumbió ayer a las presiones y anunció su dimisión al frente de la secretaría general del PSOE gallego, que ganó en unas primarias abiertas celebradas en septiembre de 2013. Pese a que la juez sumó hace una semana seis imputaciones a las cuatro que Besteiro ya acumulaba, el político socialista se va convencido de "su total y plena inocencia".

En una rueda de prensa en Santiago de Compostela, el ya exdirigente socialista explicó que desde ahora será "un militante más" y se esforzó en desvincular su decisión de los designios de Ferraz. Así, comunicó a los periodistas que su decisión fue "libre y responsable", que nadie le pidió que renunciara, y que el líder del PSOE, Pedro Sánchez, se limitó a respetar su determinación, informa "Efe".

Un comunicado de Ferraz señala que la dirección del PSOE "respeta y comparte" la decisión del ya ex secretario general del PSOE de Galicia, aunque mantiene su "absoluto respeto por la presunción de inocencia". En la nota, la cúpula socialista valora el "gesto" de Besteiro y "reconoce y agradece su trabajo" al frente del PSdeG, que defiende.

Ferraz ha decidido nombrar una comisión gestora para dirigir el partido en Galicia tras la dimisión de Besteiro y ha situado al frente a la secretaria de Organización, Pilar Cancela, próxima al dimisionario. Este órgano dispone de un plazo de seis meses para convocar un congreso que elija a la nueva ejecutiva regional, informa "Europa Press"-

La titular del juzgado de instrucción número 1 de Lugo, Pilar de Lara, investiga a Gómez Besteiro en la operación Pulpo, para esclarecer si en la Diputación de Lugo, que el hasta ayer secretario general del PSOE gallego presidió desde el año 2007 al 2015, se gestionaron fondos de manera irregular.

Dos operaciones

En concreto, la instructora investiga si el exdirigente socialista es responsable de los delitos de cohecho, prevaricación, tráfico de influencias, fraude a las Administraciones Públicas, fraude de subvenciones, y otro continuado de malversación de caudales públicos.

De Lara también lo investiga en otra causa, derivada de la operación Garañón, y en ese sumario Besteiro está imputado por tráfico de influencias, prevaricación, cohecho y un delito contra la ordenación del territorio.