El líder socialista Pedro Sánchez se mostró ayer impermeable a las encuestas que anuncian una polarización del voto hacia el PP y Podemos e incluso un "sorpasso" a los socialistas por parte el partido morado, ahora en alianza con IU. El PSOE organizó un acto con todos los barones y 1.600 militantes en Madrid para lanzar a Pedro Sánchez hacia la nueva cita electoral del 26 de junio. El secretario general aseguró que sólo habrá un cambio político en España si gana su partido y garantizó que si así lo deciden los españoles con su voto habrá un gobierno "limpio y social" en una semana, desde el que será "generoso". "Todo lo que no han sido conmigo, yo seré generoso", afirmó en alusión a Podemos.

Al acto acudieron un acto al que han acudido los exsecretarios generales del PSOE, excepto Felipe González, que mandó un mensaje en vídeo, y sus dirigentes territoriales. Sólo faltó el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que sigue la situación por el incendio del vertedero de neumáticos de Seseña (Toledo).

Sánchez garantizó que sale a ganar las próximas elecciones y se mostró convencido de que puede conseguirlo. Pero, además, avisó a los españoles de que sólo así podrán cambiar las políticas en España: "El cambio no tiene intermediarios, la garantía de cambio es decir sí al PSOE".

Por eso, apeló a la confianza de los ciudadanos y ha defendió, además, que quiere que le voten con "ilusión". "No quiero que nos voten ni con miedo ni con rencor, quiero que nos voten con ilusión", insistió. En su intervención, Sánchez tiró de orgullo socialista y sacó pecho de los logros en su historia pero también de los gobiernos autonómicos, entre ellos el asturiano Javier Fernández, a cuyos presidentes elogió, destacando su apuesta por la sanidad, la educación o el empleo, mientras les estrechaba la mano uno a uno.

Así, Pedro Sánchez volvió a hilar un discurso en positivo, centrando sus críticas en las políticas que ha puesto en marcha el Partido Popular estos últimos cuatro año y sin mencionar a Unidos Podemos, aunque sí se refirió a la coalición para defender que el PSOE sólo necesita sus "cuatro letras", burlándose de que otros "se van a tener que presentar con papeletas apaisadas".

Además, el líder socialista aludió al partido de Pablo Iglesias cuando defendió que los españoles deben castigar en las urnas el "bloqueo" institucional que provocaron, junto al PP, al no permitir su investidura. Sánchez recalcó que aunque el próximo 26 de junio se presentan a las elecciones "los mismos", a los "ojos de los españoles" no son "iguales" porque unos han trabajado por el cambio y otros lo han "bloqueado".

Y, por lo que se refiere al partido de Mariano Rajoy, también ha defendió que tiene que "pagar" la multa que la Comisión Europea pondrá a España por no cumplir con el déficit. En este punto, acusó al presidente del Gobierno en funciones de "agitar banderas para no hablar del multazo", en referencia a la polémica por la prohibición de la senyera en la final de la Copa del Rey. Sin embargo, ha lamentado, los españoles van a tener que "pagar dos veces el incumplimiento de Rajoy" con la UE.