Podemos ha anunciado que no asistirá a la tradicional recepción anual que tienen previsto ofrecer los Reyes el próximo domingo a las autoridades baleares y a una representación de la sociedad de las islas en el Palacio de la Almudaina.

Aunque no acudirá nadie en representación del partido, sí lo hará la presidenta del Parlament balear, Xelo Huertas, de dicha formación, para atender su responsabilidad como segunda autoridad de las islas y representante del poder legislativo balear, ha informado Podemos Baleares en un comunicado.

La portavoz del grupo parlamentario en la cámara balear y secretaria política de Podemos en Baleares, Laura Camargo, ha explicado al respecto que considera que "una recepción real no es el espacio mejor para poder comunicar los problemas de las mayorías sociales de las islas que son los que preocupan y por los que trabaja Podemos".

En la nota, el partido se declara "profundamente demócrata" y manifiesta que considera necesario que "la prefectura del Estado, así como el resto de sus mandatarios, se debe escoger por la ciudadanía a través de las elecciones en las urnas". "Pensamos que la monarquía continúa muy alejada de las demandas y vidas de las mayorías sociales", concluye la nota.

Es el segundo año consecutivo que los representantes de Podemos declinan la invitación de casa real para asistir a la recepción.

La agenda institucional prevista por el rey Felipe VI en Palma incluye su asistencia el sábado por la tarde en el recinto Ses Voltes del Parc de la Mar a la entrega de trofeos de la 35 Copa del Rey Mapfre de Vela.

Al día siguiente, Felipe VI y la reina Letizia ofrecerán por la noche en el Palacio de la Almudaina su recepción anual a las autoridades baleares y a una amplia representación de la vida social del archipiélago, un acto al que el verano pasado asistieron cerca de cuatrocientos invitados.

El Rey inauguró el lunes pasado su agenda veraniega en Mallorca con las tradicionales audiencias a las principales autoridades de esta isla y Baleares, si bien la especial situación política que vive España ha condicionado este año la estancia de don Felipe, que regresó el martes a Madrid para mantener la habitual reunión semanal con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.