El líder de Podemos, Pablo Iglesias, se impacienta con la táctica de su homólogo socialista, Pedro Sánchez, de conversar con unos y otros sin desvelar si está dispuesto a encabezar una alternativa de Gobierno. Iglesias fue terminante ayer al afirmar que un Gobierno en solitario de los socialistas es "una locura" para la que Podemos no dará "cheques en blanco".

El jefe de filas morado se quejó, en declaraciones efectuadas en el Congreso de los Diputados, de que las gestiones de Sánchez no hayan producido ningún avance hacia un desbloqueo de la situación. Explicó que, desde la conversación telefónica de media hora que mantuvieron el pasado martes, no ha vuelto a establecer ningún contacto con el secretario general del PSOE.

El martes, Sánchez defendió su viaje idea de un entendimiento con Ciudadanos y Podemos, mientras que Iglesias se reafirmó en la coalición de socialistas y morados con respaldo de los nacionalistas. Ayer, el secretario general de Podemos no se anduvo con paños calientes: "Creo que el PSOE debe dejar de marear la perdiz y ser claro y, si no, decir claramente que quiere nuevas elecciones", dijo.

"No es serio; los ciudadanos empiezan a estar hasta las narices de una situación en la que nadie toma la iniciativa", lamentó Iglesias, para quien es el PSOE el encargado de dar un paso adelante. En su opinión, basada en un simple cálculo matemático, sólo hay dos posibilidades para que se logre un Gobierno de Podemos con los socialistas: que se abstenga Ciudadanos, lo que estima difícil dados los vetos cruzados que tienen naranjas y morados, o que se llegue a un acuerdo con los catalanes de ERC y PDC, y con los vascos del PNV. A Iglesias no se le oculta que esta segunda vía también presenta dificultades, pero defiende que "merece la pena recorrerla porque es la única posibilidad de lograr un Gobierno alternativo al PP".

El secretario general de Podemos también terció ayer en la batalla abierta por el control de la formación en Madrid, desmarcándose de la plataforma presentada a bombo y platillo el miércoles por la portavoz del Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, y la diputada Tania Sánchez, exdirigente de IU. Iglesias consideró que en el proceso de renovación de Podemos en Madrid va a haber muchas propuestas y "mucho mejores" que la de Maestre y Sánchez, vinculada a las filas "errejonistas".

El dirigente morado dio por hecho que el portavoz de Podemos en el Senado, Ramón Espinar, también concurrirá al proceso y añadió que tanto él como otros militantes "serán capaces de hacer propuestas que avancen hacia un debate mucho más interesante con la gente de los círculos de Madrid". Iglesias puso de manifiesto que no coincide con "quienes anteponen nombres y fotografías a las propuestas".

Tras explicar que está obligado a mantener su neutralidad como secretario general, el líder de Podemos concedió que se encuentra más próximo a Espinar -un hombre del entorno del exdirigente de Podemos Juan Carlos Monedero- que a Maestre y Sánchez. "Creo que he sido más que explícito con ustedes", dijo.

También fue requerido sobre lo que ya se conoce como "guerra de Madrid" el secretario político de Podemos, Íñigo Errejón, quien rechazó que la plataforma de Maestre y Sánchez haya sido lanzada desde su entorno. Errejón recordó que serán las primarias las que finalmente decidan si es esa plataforma u otras, incluida la que previsiblemente presentará Espinar, la que se encarga de pilotar Podemos en Madrid. El secretario político descartó que en la organización se esté librando una guerra por Madrid: "Son procesos democráticos de debate abierto", afirmó.