Francisco Correa aseguró en el juicio que la expresidenta madrileña Esperanza Aguirre intervino en la adjudicación de dos parcelas propiedad del Ayuntamiento de Majadahonda que acabó adquiriendo Sacyr Vallehermoso por "21.000 millones de pesetas".
Correa relató que en un principio las dos parcelas iban a ser traspasadas a la empresa Patrimonio Municipal de Majadahonda S. A. (Pammasa) por 700 millones de pesetas.
Éste es, según él, el "origen" del caso, ya que las discrepancias sobre la forma de vender estos terrenos provocaron la salida del consistorio del denunciante del caso, José Luis Peñas. Ahí se inicia una "guerra interna" en el partido para que los terrenos no salgan a concurso público, aseguró.
"Aguirre les obligó a que no los adjudicaran", siguió. Y agregó que tras la salida de Peñas, Aguirre "da la orden a Pío García-Escudero o al que estuviese en ese momento, a Paco Granados o al que fuera, para que volvieran a sacar los terrenos a concurso público". "Sobran las palabras", concluyó.
