La gestora del PSOE ha asegurado este martes que la decisión del Consell Nacional del PSC de votar no a Mariano Rajoy en las dos votaciones de la investidura supone "una ruptura unilateral en la leal y exitosa unidad de acción" que ambos partidos mantiene desde 1978.

En un comunicado, Ferraz lamenta "profundamente" el paso dado por el máximo órgano de los socialistas catalanes al considerar que va contra el mandato del Comité Federal del PSOE de abstenerse ante Rajoy en la segunda de las votaciones, que previsiblemente será el próximo sábado.

La gestora que preside Javier Fernández pide a los siete diputados del PSC, a los que recuerda que no tienen grupo propio en el Congreso, que deben "obedecer" el mandato del PSOE y votar "conforme a lo acordado de manera democrática y mayoritaria" por el máximo órgano el pasado domingo.

También apela "a la sensatez, a la historia común" entre ambas formaciones y a la tarea común desarrollada durante casi cuatro décadas de colaboración.

"No existe, por tanto, justificación alguna para contravenir el acuerdo adoptado por el Comité Federal", sentencia la gestora ante el desafío planteado por la formación que lidera Miquel Iceta.

Ferraz advierte de que, "en la cultura del PSOE, las decisiones de los órganos del partido han sido defendidas en todo momento por el conjunto de la organización, sean cuales hayan sido".

Esta decisión, remarca la gestora, "supone una ruptura unilateral en la leal y exitosa unidad de acción que PSC y PSOE vienen manteniendo desde 1978, sobre la base de la defensa de los valores del socialismo democrático y de un trabajo compartido en defensa del progreso de España y de Cataluña".

Acuerdo por unanimidad

El acuerdo del Consell Nacional de desobedecer al Comité Federal del PSOE y de ratificar el rechazo a la investidura de Rajoy ha sido respaldado por la unanimidad de sus miembros -241 votos a favor y sólo una abstención-.

Miquel Iceta, primer secretario del partido, ha intervenido en la reunión para defender el 'no' a Rajoy, aun siendo consciente de que generará un "problema" con el PSOE. La resolución votada por unanimidad expresa el rechazo a Mariano Rajoy por sus políticas económicas y sociales y por ser "en gran medida" responsable de la falta de diálogo de los gobiernos catalán y español.

El texto pide específicamente a los diputados del PSC en el Congreso que "voten negativamente la investidura de Mariano Rajoy en primera y segunda votación", alegando que la Constitución no contempla un "mandato imperativo" a los parlamentarios.

Sin embargo, en su intervención en el Consell Nacional, Iceta no ha cambiado sus postulados y ha defendido el voto contrario a Rajoy, porque cree que los socialistas catalanes no deben estar al lado de una de las "locomotoras" en rumbo de "colisión" con Cataluña.

"Una abstención en la investidura de Rajoy nos inhabilitaría para tender puentes y proponer soluciones en el momento que más falta hacen", ha advertido.

Escalada de tensión

El acuerdo del Consell Nacional y la reacción de la gestora suponen un paso más en la escalada de tensión entre el PSOE y el PSC.

Antes de la reunión del PSC, Javier Fernández ha afirmado que si los diputados catalanes y otros del grupo socialista rompen la disciplina de voto en la segunda votación, reunirá a la gestora para decidir qué medidas adopta.

No obstante, Fernández ha apuntado que "nadie de la gestora está lanzando ningún tipo de amenaza punitiva" y que ahora corresponde "persuadir" a los diputados que pretenden ser díscolos.

Ferraz y algunos barones territoriales, como el extremeño Guillermo Fernández Vara y el castellanomanchego Emiliano García-Page, ya advirtieron este lunes, al PSC de que si no rectifica en su desobediencia se tendrá que revisar el protocolo de relaciones que hay vigente entre ambos partidos desde 1978.

Once díscolos

De los 84 diputados socialistas, hay once que ya han anunciado que no cumplirán la orden de la dirección y rechazarán a Rajoy en las dos votaciones, siete de ellos del PSC, además de Odón Elorza, Margarita Robles, la diputada por Zaragoza Susana Sumelzo y la excomandante Zaida Cantera, apuesta personal de Pedro Sánchez.

Otros cinco parlamentarios están dispuestos a votar en contra de Rajoy, pero prefieren apurar los plazos. En este grupo están los dos representantes por Baleares, Sofía Hernanz y Pere Joan Pons, y tres diputadas de Castilla y León, Mar Rominguera (Zamora), Esther Peña (Burgos) y Luz Martínez Seijo (Palencia).