Nueve inmigrantes se fugaron el lunes por la noche de un centro de internamiento de extranjeros (CIE) de Murcia aprovechando la confusión creada por un motín -el tercero que se registra en mes y medio en las instalaciones- que se saldó con nueve policías atendidos, seis de carácter leve y tres por golpes propinados en la cabeza por los amotinados con las rejillas del sistema de aire acondicionado.

Cuatro sindicatos policiales denunciaron la falta de un protocolo de actuación y la carencia de medios materiales de los CIE. Pero el delegado del Gobierno, Antonio Sánchez-Solís, dijo que al estallar el motín había veinte policías en las instalaciones, la plantilla del CIE al completo.

Podemos denunció que estos incidentes son síntoma de una "vulneración continuada de derechos humanos".