Pedro Sánchez vuelve. Tras un tiempo de silencio tras renunciar al acta de diputado horas antes de la votación para la investidura de Mariano Rajoy y después de un viaje por EE UU, el exsecretario general del PSOE iniciará su "maratón" personal para reconquistar el poder en Valencia. Será el sábado de la semana próxima, han asegurado esta mañana fuentes de su entorno. Celebrará un encuentro con militantes en Xirivella y una posterior cena en Sueca.

¿Por qué Valencia? "Por el amplio respaldo con el que cuenta", respondían fuentes de la dirección socialista en la provincia de Valencia. El secretario general del PSPV provincial, José Luis Ábalos, es uno de los hombres de confianza de Sánchez. Precisamente, acaba de salvar su puesto esta semana en la dirección del grupo socialista en el Congreso de los Diputados, a diferencia de otros afines al exlíder. Ábalos, no obstante, no rompió la disciplina de voto en la investidura y se abstuvo.

Sí Sánchez cuenta con el respaldo mayoritario de la ejecutiva de la provincia de Valencia -así se vio en su última encuentro, en el que aprobó una resolución en apoyo de la convocatoria ya del congreso federal y las primarias-, no puede decirse lo mismo de la dirección autonómica del PSPV. El presidente de la Generalitat y líder de los socialistas valencianos, Ximo Puig, ha mantenido en los últimos años una relación distante con el madrileño. Fue además uno de los 16 miembros de la ejecutiva federal que dimitió para forzar la salida de Sánchez de Ferraz.

Sánchez no tiene previsto iniciar aún una gira extensa por España para defender sus posiciones. Pretende esperar a la convocatoria de las primarias para volcarse en la campaña por la secretaría general. De momento, realizará actos independientes, como la visita a Valencia.

La presencia en Xirivella y Sueca (antes de la campaña del 26J estuvo también en Burjassot) será un buen termómetro de la situación en el socialismo valenciano, si las aguas vuelven a su cauce o si persiste un amplio rechazo a la abstención en favor de Rajoy. Servirá para medir fuerzas y también para comprobar apoyos entre cargos importantes del partido en Valencia. La consellera de Sanitat, Carmen Montón, se ha mantenido leal al exsecretario general en toda la crisis interna del mes de octubre.