El sector de Íñigo Errejón pondrá el pacto sobre la futura estrategia política de Podemos como condición previa para cualquier otro tipo de acuerdo sobre el reparto del poder interno. Los errejonistas, que gozan de una nueva posición desde que la reciente consulta a los inscritos revelase que tienen un respaldo similar al del sector de Iglesias, encaran la asamblea ciudadana estatal de Vistalegre en una posición de fuerza. Irene Montero, jefa de gabinete de Iglesias, les advierte de que la formación morada "no puede ser una tarta a repartir", en un intento de rebajar sus pretensiones de tener una presencia amplia en la dirección que salga de la cita del 12 y 13 de febrero.

"Primero hay que fijar la estrategia y después la táctica", sostiene Jorge Moruno, responsable de Discurso del partido morado y uno de los más estrechos colaboradores de Errejón. Cualquier negociación con otros sectores, como el que encabeza Iglesias, debe basarse en consensuar el rumbo político antes de entrar al reparto de secretarías en el nuevo Consejo Ciudadano Estatal, el máximo órgano de dirección entre asambleas. De no alcanzarse ese acuerdo previo, Mouro anticipa que los errejonistas defenderán sus documentos y una lista propia a la dirección. Lo que no harán, sin embargo, es presentar candidato a la secretaría general, un puesto que asumen que le corresponde a Pablo Iglesias, algo que nadie cuestiona.

"En un proceso de debate cada cual tiene derecho a plantear lo que sea. Yo voy a intentar cuidar las respuestas. Hay que buscar unidad y no sacar los trapos sucios en los medios de comunicación. Tenemos por delante un Vistalegre en que el objetivo es organizarnos para ganar a Rajoy", señalaba ayer Irene Montero, muy cercana al secretario general. Para Montero "hay que garantizar que Podemos no es una tarta, que la gente no necesite adscribirse a ninguna familia" para intervenir en el debate.

En el nuevo Vistalagre, Podemos debe "reformularse" porque "el tiempo político es diferente", sostiene el secretario de Organización, Pablo Echenique.