Ángel Sanchís Herrero, hijo del extesorero de Alianza Popular Ángel Sanchís Perales, acusado en el caso Gürtel de colaborar en la ocultación de la fortuna de Luis Bárcenas, se ha preguntado hoy en el juicio que si en el PP no dudaban de éste, por qué iba a hacerlo él.

Sanchís Herrero ha comparecido en una jornada de la vista en la que estaba previsto que declarara la esposa de Bárcenas, Rosalía Iglesias Villar, para quien la Fiscalía pide 24 años de prisión.

Sin embargo, el presidente del tribunal, Ángel Hurtado, ha comunicado que dado que se ha alargado hoy su testimonio y que no quiere partir el interrogatorio a Rosalía Iglesias la Sala ha decidido aplazar al lunes próximo la declaración de esta acusada.

A preguntas de la fiscal Concepción Sabadell, Ángel Sanchís Herrero ha sido preguntado por los tres millones de euros que Bárcenas prestó a su padre y que luego destinó a pagos relacionados con empresas de la familia en Argentina, donde el acusado reside desde 1991.

El hijo de Sanchís ha dicho que esos tres millones eran fondos documentados y que en esa época no sabía que Bárcenas estaba siendo investigado. De hecho, no interpretó que hubiera problema alguno porque en el PP no se dudaba de él, mantenía su despacho y su actividad en Génova. "Si la gente del partido no dudaba de él, ¿por qué iba a dudar yo y ser más papista que el Papa?", ha añadido.

Ha explicado que su padre le puso en contacto con Bárcenas y que firmó e 2011 un contrato con él ya que su empresa, que se dedicaba a vender limones, necesitaba los contactos que aquél tenía de sociedades que pudieran ser compradoras en varios países ya que las ventas habían bajado.

Sanchís Herrero ha insistido en que aunque no recordaba que Bárcenas ya estuviera imputado seguía siendo una persona con un cargo en un partido importante y por tanto no entiende por qué no podía trabajar para su empresa.

El acusado ha recordado además que Bárcenas le dijo que iba a dejar la política y que iba a realizar negocios en el "sector del agro".

"Es injusto que porque una persona esté señalada no pueda vivir y ¿si alguien sale de la cárcel no le puedo dar trabajo?", ha apostillado y ha recordado que Mercadona le comunicó que dejaba de comprarle "por culpa" del caso Gürtel.

Tanto él como su padre están acusados de ayudar a Bárcenas a ocultar su fortuna en Suiza en 2009, cuando estalló el caso Gürtel.

Según la Fiscalía, una de esas operaciones de ocultamiento fue la simulación por parte de Bárcenas de la concesión de un préstamo de tres millones de euros a Sanchís.

Durante su declaración en la Audiencia Nacional, el hijo del extesorero de Alianza Popular ha considerado "inviable" que Bárcenas llegara a ser accionista de sus empresas, como Brixco, porque estaba totalmente prohibido que alguien de fuera de la familia Sanchís entrara en sus sociedades. El fiscal pide seis años de prisión para Ángel Sanchís Herrero y ocho para su padre.

El juicio seguirá el lunes en la sede de la Audiencia Nacional en San Fernando de Henares (Madrid) con la declaración de Rosalía Iglesias.

Durante la declaración de Bárcenas en el juicio, que se prolongó tres días de esta misma semana, el extesorero quiso dejar a su mujer totalmente al margen de sus negocios.

"A mi mujer no le interesan estos temas: no le interesan, no le han interesado nunca y siguen sin interesarle", indicó después de afirmar que con ella no hablaba de trabajo porque su función se limitaba a "llevar la casa".

Bárcenas también explicó en más de una ocasión que su esposa firmaba documentos que el presentaba sin saber qué eran y que lo hacía por la "confianza" propia que existe en un matrimonio.

Y aunque le acompañaba algunas veces a los bancos suizos, Rosalía Iglesias tampoco sabía qué hacía su marido dentro y se limitaba a esperarle en una salida donde le ofrecían "un café o una coca-cola".