El soberanismo prepara una respuesta masiva al inicio, mañana, del juicio a Artur Mas. Casi 40.000 personas se han inscrito para acompañar al expresidente catalán y a las exconsejeras Joana Ortega e Irene Rigau al banquillo de los acusados, donde se sientan por organizar la pseudoconsulta del el 9-N, y unos 157 autocares saldrán de diversos puntos de Cataluña para transportarlas a Barcelona.

Òmnium Cultural, la Asamblea Nacional Catalana, la Asociación Catalana de Municipios (ACM) y la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) facilitaron ayer estos datos, aunque el presidente de Ònmium, Jordi Cuixart, vaticinó que habrá muchas más personas, que no se han apuntado pero que mañana saldrán a la calle para acompañar a Mas, informa "Efe".

Cuixart llamó a la participación porque el juicio ofrece la oportunidad de volver a reivindicar el 9-N e insistió en que Europa mirará a Cataluña y verá que un Estado "demofóbico" juzga a un presidente elegido democráticamente.

Por otro lado, el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, garantizó ayer que su partido acompañará al Gobierno en el frente contra el proceso secesionista mientras siga actuando con "serenidad, sensatez y rigor" en la aplicación de la ley.

En una entrevista con "Efe", el diputado socialista abogó por llevar a cabo una reforma de la Constitución "en clave federal", pero fijó un requisito indispensable para ello: que haya consenso en el inicio, cuando toque estudiar qué hay que cambiar; que haya consenso durante la fase de deliberaciones y consenso en el momento en que haya que aprobar la propuesta.

Tal objetivo requerirá "un esfuerzo de todos", pero en especial, detalló Hernando, de quienes "están por desbordar la Constitución", es decir, la Generalitat y los partidos que la apoyan, ERC y la CUP.

Del Govern catalán liderado por Carles Puigdemont y de los dirigentes de las otras dos fuerzas independentistas, el portavoz socialista lamentó su "radicalidad, atropello" y "altisonancia".

Frente a ello, el Gobierno debe seguir contraponiendo "serenidad y rigor en la aplicación de la ley", "lo que ha venido haciendo hasta ahora" y hay que seguir pidiendo.