El ex secretario general del PSOE y candidato a las primarias, Pedro Sánchez, calificó ayer de "insuficiente" la ponencia económica presentada el sábado por la gestora de su partido de cara al próximo congreso. Sánchez, que presentó su proyecto "Somos socialistas" en Aldeanueva de Ebro (La Rioja), insistió en la necesidad "fundamental" de derogar la reforma laboral del PP.
Igualmente consideró que se echa de menos en la ponencia que las inversiones públicas no computen para el déficit, garantizar un ingreso mínimo vital, convertir a España en una "plataforma logística" o abrir un debate para reconstruir el Pacto de Toledo sobre las pensiones.
Respecto a este último punto, Sánchez resaltó que no comparte que, "para sostener las pensiones, haya que prolongar la edad de jubilación", porque "lo que hay que hacer es tener más población ocupada, con sueldos dignos" y "también abrir vías de financiación complementarias a la Seguridad Social, como que las grandes corporaciones contribuyan más". Por otra parte, propuso abrir un debate "sobre oligopolios y monopolios" y "sobre una reforma fiscal".
Sobre la ausencia de la derogación de la reforma laboral de la ponencia económica, el portavoz de gestora, Mario Jiménez, respondió a las críticas asegurando que finalmente sí estará incluida, ya que es un aspecto, dijo, "fundamental".
El otro candidato a las primarias socialistas, Patxi López, destacó en Burgos que "no se resignará" a rendirse, "pese a las cossas que puedan oírse", y prometió que "habrá una papeleta" con su nombre en el proceso electivo del que saldrá el nuevo líder del PSOE. En una clara advertencia a la presidenta andaluza, Susana Díaz -que sigue manteniendo su silencio y ayer prometió que hablará más adelante-, López advirtió que el nuevo líder no puede serlo "a media jornada".
