La Infanta Cristina estudia pedir al Tribunal Supremo que se prohíba la emisión o publicación de toda imagen en que ella aparezca en el banquillo de los acusados por el caso Nóos. Después de haber sido absuelta por la justicia de los delitos fiscales de los que se le acusaba y únicamente condenada a título lucrativo, la hermana del Rey se propone "limpiar cualquier sombra de duda sobre su honorabilidad". Para ello, Cristina de Borbón estudia recurrir su sentencia para que se reconozca que "nunca se tendría que haber sentado en el banquillo de los acusados" y reclamar el derecho al olvido.

Así lo avanzó su abogado Pau Molins ayer en una entrevista al canal 3/24. Según explicó la hija menor del Rey Juan Carlos I se está planteando interponer un recurso de casación ante el Supremo ya que "tiene ganas de limpiar cualquier sombra de duda sobre su honorabilidad". "Aunque sea para, el día de mañana, tener un papel para sus hijos que diga que nunca se tendría que haber sentado en el banco de los acusados", expuso el letrado de la Infanta, que indicó que de concretarse se pedirá el derecho al olvido para intentar eliminar las imágenes de la Infanta declarando en el banquillo del juicio del caso Nóos.

"Estas imágenes han hecho mucho daño", aseguró Molins, que recordó que interponer un recurso significaría que el caso siguiera abierto y que ello implicaría someter de nuevo a la Infanta a la exposición mediática, algo que genera dudas a la hora de formalizar el recurso, aunque ha negado que pueda suponer ningún otro riesgo para la Infanta.

Hace una semana fue otro de sus abogados, Jesús María Silva, quien ya apuntó esta posibilidad, así como las dudas que generaba en el seno del equipo encargado de su defensa. El abogado admitió que aunque al final se hará "lo que ella quiera" existen discrepancias en el equipo de defensa sobre la conveniencia de presentar este recurso: él y varios letrados son partidarios, mientras que otros no están por la labor de recurrir, con lo que aún debate qué hacer.

Diferencias entre sus abogados

Silva sostiene que Manos Limpias no tenía legitimación para haber acusado a la Infanta y cree que, si recurren al Supremo y éste le da la razón, les permitirá abrir nuevas vías para intentar por ejemplo "que desaparezcan las imágenes de los medios o ejecutar el derecho al olvido ante Google".

En la entrevista de ayer, el abogado penalista Pau Molins comentó asimismo que "es difícil" que el Supremo rebaje la pena a Iñaki Urdangarín, defendido por el abogado Mario Pascual Vives, que fue condenado a 6 años y 3 meses de cárcel por la Audiencia de Palma por el caso Nóos. "Al contrario que la Infanta, el caso Urdangarín puede acabar con un aumento de pena en el Supremo", subrayó el letrado de la Infanta.

El tribunal de Nóos condenó a la Infanta a título lucrativo y le impuso el pago de 265.088 euros. La hermana del Rey, durante la instrucción del caso, ya había depositado ante la justicia 587.413 euros, que era lo que le reclamaba la Fiscalía Anticorrupción. Finalmente, deberá pagar menos, con lo que a la Infanta la Justicia deberá reembolsarle más de 322.000 euros. Además, el sindicato Manos Limpias, acusación popular y única parte que pedía cárcel para la Infanta, deberá pagar todas las costas que el proceso judicial le causó a Cristina de Borbón.