El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, lanzó ayer en Madrid una advertencia al Gobierno durante su polémica conferencia de presentación de sus planes para el referéndum. A su entender, el Ejecutivo "no dispone de tanto poder como para impedir tanta democracia". El acto, en la Caja de Música del palacio de Cibeles, sede del Ayuntamiento de Madrid, vino precedido la pasada semana de protestas contra la alcaldesa, Manuela Carmena, por ceder los locales y ayer suscitó una concentración ultraderechista.

"Negar el carácter político de la demanda catalana y fiarlo todo al trabajo de fiscales y jueces no es la solución sino que incrementa el problema", subrayó Puigdemont, quien añadió que "en los juzgados no se hace política". Para el President, la invitación del Gobierno del PP a debatir en el Congreso su propuesta de referéndum es una "coartada" para no negociar. Puigdemont reiteró al Ejecutivo su petición de una negociación previa, que luego sea refrendada en el Congreso, y puso como precedente histórico el decreto que restauró la Generalitat de Cataluña, luego incluida en la Constitución de 1978.