Queda mucho por coser en la unidad del socialismo asturiano. La división ante el congreso autonómico está cantada, al menos a día de hoy. El javierismo, que acabó quedándose solo votando en contra de la España plurinacional de Pedro Sánchez, no se anduvo con rodeos para cuestionar de plano la estrategia de la nueva ejecutiva en la composición del comité federal y denunció "exclusión" y "sectarismo".

Fernando Lastra volvió a poner voz al descontento existente en el, hasta ahora, sector oficial de la FSA por la negativa de los pedristas asturianos a negociar los nombres de los cinco representantes de Asturias en el comité federal. El portavoz socialista en la Junta General dejó bien claro que no hay nada que objetar a la composición de la ejecutiva federal pero matizó que el órgano de control ha de ser plural. "Entiendo perfectamente que Pedro Sánchez elija a la ejecutiva que le parezca, un equipo de confianza que tendrá todo el respeto que también merece el secretario general, pero el comité federal debe reconocer la pluralidad existente en el partido. No hacerlo es una imposición."

"Que yo recuerde debe ser la primera vez que una dirección política no negocia la composición de un órgano de control, que representa la pluralidad del partido, como es el comité federal", sostuvo Lastra. El veterano dirigente socialista aseguró que "no se ha negociado con la parte de la delegación asturiana que representa al 40 por ciento; no ha habido ninguna iniciativa ni vocación de negociar nada. Es un mal síntoma, algo muy negativo y que indica unas formas de actuar que ni gustan ni convienen ni son lo que el partido en Asturias espera de esta nueva etapa".

Los reproches del "peso pesado" en el Grupo Socialista de la Junta General no quedaron ahí: "se dicen muchas cosas acerca de la pluralidad y del respeto interno a las opiniones distintas pero se actúa de una forma diferente. Se actúa excluyendo. Estamos viendo una actitud que, de ser la pauta de comportamiento, vamos hacia el sectarismo y la exclusión. Y esa es una mala manera de empezar", concluyó Lastra.

El Padre Ángel, invitado

Adrián Barbón realizó una lectura bien distinta de la composición del comité federal que, a su juicio, es una muestra de unidad e integración "porque está pactada con la dirección de Andalucía. Hay susanistas en la lista. Lo importante no es competir por tribus o pactos de mesa camilla sino darse cuenta de que estamos en un tiempo nuevo. Todos tenemos que estar detrás del secretario general y la lista es fruto del acuerdo. Los cinco asturianos representan el sentir mayoritario de nuestra Asturias", señaló el alcalde de Laviana, muy satisfecho por los puestos obtenidos por asturianos en los órganos de dirección del PSOE. Una lista de cargos en los que no figura su nombra acaso porque ya se acerca el tiempo de preparar su candidatura a la secretaría general de la FSA en el congreso de septiembre. "Los militantes son los soberanos. El Congreso de FSA llegará con uno o dos proyectos y la militancia votará. Lo que pasó a nivel federal es una demostración de que no hay cortapisas al poder de la militancia y que ha decidido tomar decisiones directas. Este congreso reconduce al partido: La militancia ha decidido que se tomaron decisiones erróneas y lo mismo puede pasar en Asturias. La militancia elegirá soberanamente". De momento, Barbón ha optado por no descubrir sus cartas porque "aún no se ha convocado el congreso y no se trata de visibilizar caras, sino proyectos. Ahora trabajaremos en ello y seguro que habrá una opción de cambio, aunque es pronto para decidir quién la encabezará".

Entre los invitados al congreso se dejó ver el Padre Ángel, que ya estuvo en febrero en los cónclaves del PP y Podemos. "Y estaré en los próximos que hagan. Quiero mucho a la gente y la gente me quiere mucho a mí. Pedro y yo nos queríamos antes de ser secretario, durante, después y ahora que ha vuelto", manifestó el sacerdote mierense.