La confusión más grande reinaba anoche sobre el autor y los posibles cómplices del atentado de Barcelona. A lo largo de la tarde se sucedieron numerosas informaciones contradictorias que, anoche, habían quedado depuradas por los investigadores hasta permitir formular un escueto relato que fue comunicado a última hora por el mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluís Trapero.

Según este mando policial, el autor del atentado de Barcelona, del que no se ha facilitado una identidad verídica, iba solo a bordo de la furgoneta con la que masacró a la multitud. Tras quedar varado el vehículo a la altura del Liceo, el terrorista, que vestía una camisa de rayas azules, se bajó del mismo y sin mediar palabra se perdió por las calles adyacentes sin que hasta la pasada medianoche hubiera sido localizado.

Varias personas que le vieron bajarse de la furgoneta aseguraron que no iba visiblemente armado: "Nos fiamos de los testigos", dijo la fuente. Estos testigos destacaron que el hombre no profirió ningún tipo de grito ni proclama islámica, si bien Trapero no manifestó "ninguna duda" de que la masacre ha sido un atentado terrorista.

Dos de sus cómplices fueron detenidos, un marroquí y un melillense. El de origen marroquí fue arrestado en Ripoll (Girona) y el español en la localidad tarraconense de Alcanar. Trapero aseguró que ambos están relacionados con el atentado pero insistió en que ninguno de ellos fue el autor material.

Uno de los detenidos, probablemente el detenido en Ripoll, está directamente vinculado con la furgoneta del ataque, que habría sido alquilada a su nombre. Según el alcalde de Ripoll, Jordi Munell, el joven, cuya imagen difundieron los Mossos d'Esquadra como sospechoso del atentado tras haber encontrado su documentación en el vehículo, responde al nombre de Driss Oukabir Soprano y ha vivido en Marsella, teniendo antecedentes por abusos sexuales y habiendo pasado un mes encarcelado en la prisión de Figueras (Gerona) por este delito.

Oukabir Soprano fue detenido por la policía autonómica a las afueras de una comisaría donde iba a denunciar que le habían robado la documentación con la que se alquiló la furgoneta. Oukabir tiene residencia permanente en España, lo que significa que lleva al menos cinco años viviendo en el país, según fuentes policiales. El detenido en Alcanar (Tarragona) está relacionado con la explosión registrada ayer de madrugada en una vivienda de esa localidad donde sus inquilinos preparaban explosivos.

Trapero también confirmó que una tercera persona, en este caso de origen español y sin antecedentes, falleció en Sant Just Desvern después de ser abatida por los Mossos d'Esquadra, que le tirotearon cuando embistió a una sargento de la policía catalana al saltarse un control policial a la salida de Barcelona. Por el momento no consta que tenga ninguna relación con el atentado terrorista. La agente embestido sufrió la fractura del fémur.

En las primeras investigaciones tras el atentado, se localizó una furgoneta Fiat blanca en la localidad barcelonesa de Vic, en las inmediaciones de una hamburguesería. El vehículo habría sido alquilado por las mismas personas que contrataron el usado en el atentado y estaría preparado para facilitar la huida. El alquiler de ambos vehículos se produjo en la localidad de Santa Perpetua.

En esos momentos de la tarde, se había extendido la información de que un hombre, al que se consideró posible autor del atentado, se había atrincherado, en posesión de armas largas, en un restaurante próximo al mercado de La Boquería, situado en las mismas Ramblas. Se llegó incluso a especular con la posibilidad de que tuviese rehenes. Posteriormente, todos estos hechos fueron desmentidos por fuentes policiales.

Anoche planeaban aún al menos tres grandes incógnitas sobre el atentado. Se desconoce el número real de sus autores, más allá del huido y de los dos detenidos. También reina la oscuridad sobre el papel que juega el detenido en Ripoll, ya que no se ha confirmado que su documentación le hubiera sido robada. En tercer lugar no está clara cuál es la conexión entre el atentado y la explosión de Alcaner.