La plaza Mayor de Gijón se llenó a mediodía de ayer de solidaridad. Centenares de personas quisieron mostrar su apoyo a los afectados por los atentados terroristas de Cataluña y su repulsa hacia quienes los llevaron a cabo. En la concentración, que duró varios minutos y únicamente tocó a su fin cuando la lluvia irrumpió en la plaza, estuvo presente la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, así como representantes de todos los grupos municipales, además de diferentes asociaciones de la ciudad como la Federación de Asociaciones de Vecinos y expolíticos como Dulce Gallego o Tino Blanco.

Sin embargo, todos los focos se los llevó una invitada de excepción: Andrea Levy, vicesecretaria de estudios y programas del Partido Popular y barcelonesa de nacimiento.

"Yo destacaba siempre esa luz, esa alegría que tenían las Ramblas y que unos terroristas, unos asesinos, unos fanáticos, nos han pretendido arrebatar mediante ese cruel ataque", aseveró la política catalana. "Hoy es más importante que nunca que la unidad de los demócratas no tenga fisuras, que velemos a los muertos, que estemos con los heridos, con sus familias, pero que nos levantemos con la fuerza que nos da saber que somos libres, una sociedad abierta, tolerante y democrática que hemos conseguido frente a los ataques de aquellos que odian al que se siente libre", añadió.

Levy quiso también "poner en valor el trabajo de las fuerzas y cuerpos de seguridad, que han trabajado unidos en estos duros momentos que también sacan lo mejor de nosotros, lo mejor de la sociedad, y ayer Barcelona fue un ejemplo para todos, cediendo sus casas, habilitando coches, dando gratis servicios como taxis, donando sangre". La popular, visiblemente emocionada, aseveró que "golpea doblemente cuando golpea en tu ciudad, en la ciudad que te ha visto crecer, donde tienes tantos recuerdos, sobre todo de esa zona de las Ramblas, un ejemplo de diversidad", concluyó.

Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana, Esteban Aparicio, quiso hacer hincapié en que "el riesgo cero no existe, por muchas medidas que se tomen y mucho seguimiento que haya estos actos se pueden producir".

En Avilés, decenas de personas también condenaron los ataques terroristas. Un prolongado aplauso cerró un minuto de silencio largo y con caras serias. "Es un ataque a la forma de vida de ciudades en las que vivimos con libertad, normalmente con seguridad y donde generamos convivencia positiva y sana. Por eso espero, deseo y quiero que la UE sea cada vez más fuerte, tenga cada vez más medios, más servicios de inteligencia, servicios de seguridad para trabajar en la prevención de estos atentados, menos fronteras y más unión en esta tarea que nos corresponde para dar seguridad y mantener nuestra forma de vida", aseguró Mariví Monteserín, alcaldesa de Avilés. La regidora estuvo acompañada de representantes de todos los grupos políticos, miembros de las fuerzas de seguridad del Estado, de la Cámara de Comercio de Avilés y muchos vecinos. Entre ellos también estaba Gabriela Bravo, consejera de Justicia y Administración Pública de la Comunidad Valenciana, de vacaciones en la región, quien subrayó: "Todos tenemos que estar unidos, comprometidos en la lucha contra el terrorismo".

El director de los cursos de La Granda, Juan Velarde, hizo una lectura del contexto de los atentados. "Hemos chocado con el problema que tiene el mundo occidental, que explicó Alfredo Weber: que es limítrofe con la Edad Media, con personas que lo entienden todo de otra manera y reaccionan de otra manera".