El número de policías y guardias civiles desplegados en Cataluña se verá aumentado en los próximos días para hacer frente a la convocatoria ilegal del referéndum independentista del 1 de octubre. El fiscal general del Estado ordenó el viernes que esos dos cuerpos y los Mossos se encarguen de paralizar cualquier movimiento destinado a facilitar la consulta, cumpliendo de ese modo las órdenes del Tribunal Constitucional, que el jueves dejó en suspenso la convocatoria del 1-O.

La Policía Nacional cuenta con 2.900 efectivos en Cataluña y dispondrá de la casi totalidad de ellos el 1 de octubre, ya que no concederá ningún permiso hasta esa fecha, aunque respetará los ya concedidos. Además, desplazará efectivos a Cataluña desde otras comunidades autónomas, aunque en un número todavía no determinado, que será precisado una vez que mañana, lunes, se celebre la gran manifestación independentista de la Diada.

En cuanto a la Guardia Civil, también verá incrementados sus efectivos ya que, por un lado, llegarán a partir de mañana los agentes que han pedido destino en esa comunidad y, por otro lado, los aproximadamente 200 que han pedido el traslado a otras comunidades verán paralizado el permiso de un mes que se les concede antes del traslado.