Diversos dirigentes independentistas catalanes restaron ayer gravedad a que empresas y bancos catalanes, muy enraizados en la historia y estructura económicos de la comunidad, estén mudando sus domicilios oficiales a otras regiones. Oriol Junqueras (de ERC y vicepresidente de la Generalitat), Marta Pascal (coordinadora general de PDeCAT) y el senador de PDeCAT Josep Lluis Cleries, entre otros, dieron por hecho que son decisiones "temporales" por la incertidumbre generada por el actual periodo de "transitoriedad" y que no tendrá incidencia tributaria ni económica y que, de hecho, no conlleva traslados de personal. Se trata, dijo Cleries, de un mero cambio de "dirección postal".

El ministro de Economía, Luis de Guindos, en su comparecencia tras el Consejo de Ministros, tachó de "triste la salida de empresas importantísimas de Cataluña por culpa de unos políticos irresponsables que han generado inquietud e incertidumbre".

Cataluña es la segunda región por el volumen de depósitos bancarios. Caixa Bank dijo en un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores que con el traslado de su domicilio oficial a Valencia pretende la "protección de sus clientes, accionistas y empleados" y "salvaguardar plenamente la seguridad jurídica y regulatoria consustancial al ejercicio de su actividad".

El Ibex, principal índice de la bolsa cedió ayer el 0,29% Caixa Bank perdió el 0,58% y Banco Sabadell, el 1,89%. Por el contrario, otras dos compañías que anunciaron su marcha de Cataluña (Service Pont y Dogi) subieron el 17% y 7%, respectivamente. Dogi llegó a subir el 20%.