ETA se disuelve tras casi 60 años de letal trayectoria. Creada el 31 de julio de 1959, perpetró su primer atentado mortal el 7 de junio de 1968 al asesinar al guardia civil José Antonio Pardines en un control de tráfico en Guipúzcoa. Su último crimen fue la muerte del gendarme francés Jean-Serge Nérin, durante un tiroteo al suroeste de París.

En estas seis décadas, ETA ha causado 829 víctimas mortales, de las cuales el 90% fallecieron en atentados cometidos tras la restauración de la democracia en España en 1977. Además, ha secuestrado a alrededor de ochenta personas, ha extorsionado a unos 10.000 empresarios y quedan sin resolver 358 de sus crímenes. La disolución llega seis años y medio después de que anunciase el final de su actividad terrorista, el 20 de octubre de 2011, a los tres días de celebrada la Conferencia de Ayete, en San Sebastián.