Unas imágenes captadas por un aficionado en la novena etapa de la Vuelta a España, que trascurrió entre Torrevieja y Benitachell, han reavivado la leyenda urbana que habla de motores ocultos en las bicicletas de los corredores.

En la recta final de la Cumbre del Sol, un mecánico del equipo Movistar baja rápidamente del coche al grito de "¡esconde la bici que no la vean, no viene nadie!".

En el vídeo se puede apreciar que el cuadro de la bicicleta está partido, por lo que la intención del mecánico no parece ser otra que no la vean para preservar así la imagen del patrocinador. Esta es además la versión dada por el Movistar, que ha querido salir al paso de cualquier tipo de polémica.

Pero en la redes sociales se ha levantado de nuevo el debate sobre supuestos motores ocultos en las bicicletas y han recordado el episodio ocurrido en la edición del año pasado de la Vuelta, cuando el canadiense Ryder Hesjedal se fue al suelo y su bici comenzó a dar vueltas sobre el asfalto de forma misteriosa.