Con la salida al mercado de su último trabajo discográfico, Rihanna ha experimentado un espectacular cambio no sólo musical, sino también físico. De su «metamorfosis», sus tatuajes y su particular y nada discreto estilo, la cantante ha querido sincerarse como portada del mes de febrero de la revista «W». Esta joven cantante de Barbados ha vivido en sus carnes lo que es el éxito absoluto y admite que le encanta su nuevo estilo de vida. En esta amplia entrevista, Rihanna desvela cómo ha madurado como artista y en su estilismo, afirmando rotundamente que no quiere volver a su anterior vida en Barbados. Nada queda de esa «extremadamente tímida» chica que en 2003 conoció al que sería su futuro productor discográfico
«Tengo que admitir que la primera vez que escuché todas las canciones me quedé en estado de shock», explica Rogers a la revista. «La primera vez que coincidí con ella, era una chica extremadamente tímida. Ese álbum era como escuchar a tu hija diciendo una barbaridad tras otra por primera vez. No voy a mentir y decir que no tenía algo de miedo por la reacción de la audiencia». Rihanna admite haber «madurado» mucho en estos últimos años, pasando de ser una «chica del montón» a definir perfectamente su nuevo estilo que la revista define como «duro». Rihanna admite que lo que más destaca de su look es el pelo y su maquillaje. «Mi estilista Mariel Henn y yo siempre intentamos elegir algo sexy pero nunca demasiado cursi... siempre intentamos ponerle a mi look un poco de "dureza"», explica.
