Palma, G. RODAS

La Reina doña Sofía se puso ayer al volante de uno de los primeros coches eléctricos que circulan por las calles de Palma. Un día después de que el fabricante de automóviles Peugeot anunciara que le ha cedido una unidad del nuevo modelo iOn para que promocione su consumo, doña Sofía decidió estrenarlo. Su breve vuelta de reconocimiento le bastó para afirmar que el automóvil va «fenomenal», comentario que ya quisieran pronunciar muchos de los pilotos de Fórmula 1 cuando se sientan en sus máquinas por primera vez.

La conductora real no tiene nada que envidiar a nuestro piloto más regio, Fernando Alonso. Ayer batió al campeón asturiano. Menos de tres minutos. Tiempo de pole, que diría el calvo de La Sexta, Antonio Lobato. En su debut al volante de un coche verde eligió un circuito urbano, de unos mil metros, los que suman el ir y venir de Marivent a la rotonda de Portopí. Y quiso probarlo sola, aunque lógicamente estuvo vigilada por otro automóvil, el de seguridad, y ése sí era de los que contaminan. Frente a palacio se agolparon algunos curiosos, ávidos por saber qué iba a ocurrir. «Ni calesa ni obamas», le aclaró un reportero a una señora interesada en la noticia. Segundos después, la puerta de Marivent se abría y aparecía el pequeño modelo, despacio, y sin hacer ruido, ésta última una de sus cualidades más aplaudidas. Doña Sofía, de vacaciones, no de carreras, se enfundó un blusón blanco con flores azules. Y lo más importante, no se olvidó de abrocharse el cinturón de seguridad.

La Reina se convirtió en la primera conductora en el mundo que disfruta del volante del nuevo Peugeot iOn, que ha sido cedido por la marca francesa y que llegó a Palma por vía aérea y directamente desde Japón, país en el que este modelo es fabricado por Mitsubishi.