Parece evidente que el estado de la carretera a Pola de Siero, complicado por el temporal, ha sido determinante para el accidente frontal que provocó el jueves heridas de gravedad a un hombre y una mujer en Granda. Por ejemplo, por un gran charco que se forma junto a la gasolinera. La Guardia Civil dejó constancia en su atestado de la irregularidad manifiesta de esa vía de la red regional . Y no era éste en el primer atestado en que lo hacía figurar. Los conductores y peatones que utilizan a diario la vieja comunicación con la Pola conocen bien sus deficiencias y sus riesgos, y algunos lo han sufrido. Pero los atestados de la Guardia Civil sólo surten efecto contundente cuando se trata de sancionar al conductor. Si hay responsabilidad en las instituciones, el informe de la Benemérita pierde eficacia. Es decir, todo sigue igual, hasta el próximo accidente. Precaución y suerte por Granda.