E. M.
«Perdimos por los votos que se fueron para Molina y Vigón y por no saber aglutinar la oposición a Ángel Cuesta», aseguró ayer Tasio del Reguero, horas después de convertirse en el principal derrotado de los comicios electorales celebrados el domingo en el Grupo Covadonga. Del Reguero justificó también su fracaso porque su principal oponente, Enrique Tamargo, «supo movilizar a la vieja guardia que apenas va al Grupo y jugó muy bien sus bazas». Además, el sociólogo y empleado de Renfe cree que el principal desequilibrio se produjo gracias a los votantes de la mesa número 8, «la de los últimos socios en pertenecer al club». «Supieron ganárselos mejor», manifestó. Para Del Reguero, a Tamargo le quedan por delante cuatro años difíciles en los que tendrá que hacer frente a «una situación económica que no está bien». Además, considera que el presidente electo estará forzado a explicar permanentemente sus decisiones, ya que «es mayor la suma de los socios que no lo han votado que la de los que lo han hecho».
