Las victorias electorales provocan cambios en los equipos de quienes triunfan y deberían también propiciarlos entre quienes sufren las derrotas. Los primeros movimientos de relevo se anuncian en el consejo de la Cámara de Comercio, donde se negocia la sustitución del representante del sector de hostelería, cargo que ahora ocupa Roberto Berciano. Gestor reconocido y unificador de candidaturas, Berciano negocia ahora su salida del órgano cameral para ser sustituido por uno de los nuevos líderes de Hostelería Gijón: Ricardo Álvarez, presidente, y Alberto Lázaro, vicepresidente. El compromiso que el gremio reclama al flamante presidente, Ricardo González, lleva a sospechar que Alberto Lázaro puede ser, casi con seguridad, el nuevo representante de la hostelería gijonesa en el consejo cameral. En fin, de bien nacidos es ser agradecidos.