Pilar Fernández Pardo, en calidad de portavoz del Grupo municipal Popular, convirtió ayer sus sugerencias al plan de integración del ferrocarril en la ciudad -el popular «plan de vías»- en alegaciones formales registradas en el edificio administrativo de la Antigua Pescadería Municipal. Una modificación formal que no supone ningún cambio sobre el fondo de la cuestión desde el punto de vista de los populares «Siempre hemos defendido y defenderemos una estación intermodall totalmente soterrada y lo más céntrica posible», sentenció la concejala y diputada nacional en la presentación pública de las alegaciones junto al concejal Pablo Fernández. El planteamiento de los populares con sus alegaciones pasa por «mejorar sustancialmente» el proyecto presentado a Gijón al Norte por el arquitecto Jerónimo Junquera a partir de la introducción de cambios que dan respuesta a los problemas planteados por los colectivos vecinales de la ciudad.

Para el PP, hay cuatro puntos irrenunciables, a saber: la estación intermodal y las playas de vías tienen que ser soterradas, se deben alejar las torres de edificios de la playa de Poniente, no es necesario construir una estación provisional en la calle Sanz Crespo mientras duren las obras, y la operación urbanística debe garantizar en su resultado final una gran permeabilidad entre el polígono de Pumarín, La Calzada, El Natahoyo, Moreda y el centro urbano. Para conseguirlo los populares colocan la estación intermodal soterrada en el espacio que ahora ocupan las polémicas torres de Juan Carlos I (en paralelo al actual Museo del Ferrocarril), y desplazan las torres hacia el Sur unos 120 metros. Sus alegaciones también plantean alejar el hotel que proyectan los Masaveu, para lo que proponen la permuta del solar que es de propiedad privada, ubicar un auditorio-palacio de congresos en un solar de 5.000 metros cuadrados de los terrenos liberados de vías y facilitar el soterramiento de las vías hasta el puente de La Braña en un primer momento y, más tarde, hasta Veriña.

Sin embargo, estas alegaciones tienen pocas posibilidades de prosperar si se tiene en cuenta que Pedro Sanjurjo, edil de Urbanismo y consejero de Gijón al Norte, ya las consideró hace unos días como carentes de rigor técnico y de viabilidad económica. «Es un "corta y pega"», criticó Sanjurjo. «Claro que es un "corta y pega", porque hemos demostrado que con muy poco se puede mejorar un proyecto», contestó ayer Fernández, arquitecto profesional. El representante popular defendió la viabilidad técnica de su iniciativa y aseguró, apoyándose para ello en palabras de Jerónimo Junquera, que se podría asumir la solución del PP con el mismo dinero que ahora maneja Gijón al Norte, o incluso menos, ya que el PP no haría una estación provisional en Sanz Crespo. Vitoria es el ejemplo de los populares en cuestión de dinero. El plan de vías gijonés tiene una financiación prevista de 310 millones, de los que 257 millones son plusvalías.

Tampoco creen los populares que su proyecto genere graves problemas técnicos de construcción. Fernández recordaba que el 80% de la obra -en concreto la estación intermodal, la mayor parte de las torres y el área de El Humedal- se podría afrontar teniendo plenamente operativa la estación Jovellanos. «En el siglo XXI todo es técnicamente viable», sentenció el concejal. «Nuestra propuesta no es un insulto, un insulto es gobernar y no ejecutar los proyectos comprometidos. Uno de ellos, éste», sentenció Pilar Fernández Pardo.