C. JIMÉNEZ

Pablo Priesca Balbín, director gerente de la Fundación CTIC, es experto en sociedad de la información y desarrollo territorial. Es licenciado en Psicología por la Universidad de Oviedo. Lleva más de 14 años trabajando en proyectos de tecnologías de la información y la comunicación (TIC), un sector que, a su juicio, goza de muy buena salud en el Principado.

-¿En qué situación se encuentra Asturias en cuanto al desarrollo de la sociedad de la información?

-Hay diferencias entre el ámbito de empresas y el de ciudadanos. La progresión que tuvo Asturias gracias a los programas públicos de apoyo a la sociedad de la información en los últimos ocho años ha sido notable. En el año 2000 sólo un 12 por ciento de la población era usuaria habitual de internet en la región. Los datos del primer semestre del año pasado nos dicen que estas cifras han subido hasta el 60 por ciento; 2005 fue el año del cambio. Antes estábamos por debajo de la media nacional y ahora hemos abierto brecha y nos encontramos dos puntos por encima, según los últimos datos del informe de la Fundación Orange. Esto demuestra que las cosas se han hecho bien y que tenemos los deberes hechos. A nivel de escolares, el nivel de usuarios de internet en la franja de edad entre 16 y 25 años ronda ya el cien por ciento.

-¿Las empresas se han aplicado en materia de digitalización?

-Ése es un problema nacional. El marco estratégico para España en materia de digitalización en el ámbito de la empresa obliga a realizar un esfuerzo para ayudar a las pymes a incorporar en sus respectivos procesos de trabajo tecnologías de la información y la comunicación, aunque si se hace bien va a significar una mejora de la competitividad. Aún nos queda un camino por recorrer en la empresa. En esta tarea tienen una importancia capital los centro SAT (servicios avanzados de tecnologías de la información y la comunicación).

-Algunas empresas del sector cuestionan el papel de los centros tecnológicos por la competencia que ejercen sobre ellos.

-Nosotros tenemos el principio ético de no competencia con el sector. Hacemos trabajos para complementarnos, pero no para competir. Las especificaciones técnicas o el desarrollo web siempre los subcontratamos a empresas del sector. Todo lo que nos puede dar el mercado lo contratamos al mercado. De hecho, las subcontrataciones que realizamos a lo largo del año suman varios millones de euros. Nosotros generamos productos intermedios; lo que sabe hacer el sector se le subcontrata, siguiendo la ley de Contratos del Estado, que representa en torno al 50 por ciento de nuestra actividad. No tiene sentido que nosotros hagamos lo que saben hacer otras empresas del sector.

-La falta de recursos humanos es uno de los problemas más acuciantes del sector TIC en el Principado. ¿Cómo lo están viviendo desde este centro tecnológico?

-Es una cuestión compleja y la solución no es fácil. Nosotros también estamos afectados por este problema, porque son gente con un nivel de especialización alto. No contratamos gente que provenga de la empresa regional porque no queremos entrar en competencia con ello. Está claro que bajó el nivel de matriculaciones en la Universidad de forma sustantiva en los últimos cinco años y que esta situación ha coincidido con un repunte de la actividad en el sector TIC regional. En general, tanto el ámbito nacional como el europeo se encuentra en un proceso de expansión porque se trata de un sector atractivo, no contamina y emplea recursos humanos de alta capacitación. Está claro que en el caso de Asturias se necesita personal cualificado y que el ritmo de crecimiento es mayor que el flujo de salida de los titulados universitarios.

-¿Qué soluciones propone?

-No es fácil dar una respuesta. Habría que mejorar los niveles de matriculación y orientación de los estudiantes dentro del sistema educativo para que no se produzcan esos desajustes. En una sociedad con tantas motivaciones como la nuestra, la cultura del menor esfuerzo creo que es la que motiva esta situación.

-¿Lo que no está en internet no existe?

-Hoy sólo quedan fuera de las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) las personas de edad muy avanzada o inmigrantes. Ante esta situación debemos repensar los programas de acercamiento de estas tecnologías a la población, pasando del modelo genérico actual a programas específicos para estos colectivos. No me imagino que exista ninguna empresa que no utilice las TIC, aunque sea en el nivel más simple del trabajador autónomo que se desplaza con un teléfono móvil.

-¿Hacia dónde se dirige la web?

-La tendencia es hacia una web más inteligente, única, independiente de fabricante y de dispositivos y de la lengua de los usuarios. Avanzamos hacia una web interoperable. Probablemente la web que conocemos hoy sea bastante diferente de la que veremos dentro de ocho o diez años. La búsqueda de información sigue siendo un problema en internet y cada vez es más difícil acotarlo a nuestras necesidades. Los buscadores van hacia programas más inteligentes de semántica que reconozcan las necesidades del usuario. Es en lo que se está trabajando más desde el área de I+D+i.

-En los últimos meses han realizado una apuesta fuerte en el área de internacionalización y cooperación internacional. ¿Cuál es su estrategia?

-Estamos en relación con otros centros comunitarios desde el área de I+D+i para participar en proyectos conjuntos y tener un flujo de comunicación con ellos. Nosotros ofrecemos tecnologías de vanguardia y de última generación en el corazón de la web para quienes trabajen con nosotros. En el área de internacionalización hemos centrado nuestras acciones en Latinoamérica, donde se nos conoce como especialistas en estandarización y herramientas de accesibilidad web. Tenemos contacto con responsables de la estrategia de e-goverment y servicios electrónicos de aquellos países. Los servicios que nosotros ofrecemos se adaptan a sus necesidades. Aquí tenemos mucho que aportar porque el retraso allí es importante. En el área de sociedad de la información, España es un país de referencia dentro de la Unión Europea. En el ámbito nacional, Asturias es el número uno.

-¿Qué es lo que distingue a CTIC frente a otros centros tecnológicos?

-No existe ningún otro centro trabajando en la tecnología que nosotros utilizamos. Esto es bueno porque significa que nos complementamos entre centros tecnológicos. Tenemos una relación estrecha con los de Aragón, País Vasco, Cataluña y León. Esto nos permite entrar en proyectos de forma conjunta y no competir. En el caso de CTIC hemos creado un hueco de mercado donde no estaban trabajando otros centros, basándonos en la tecnología del W3C. La novedad es que hasta ahora nunca se había pensado desde la perspectiva del usuario (tanto ciudadano como empresa) que podía utilizar tecnología.