A. RUBIERA

El Hospital de Cabueñes volvió a mostrar ayer la cara de la protesta. En este caso, la de los sindicatos CSI y CC OO que, acompañados de miembros de la Federación de Vecinos de las zonas urbana y rural, han tomado el protagonismo en la reclamación de más plantilla y «una organización más racional» de los efectivos para paliar los efectos de la alta ocupación que tiene el centro, según reclamaba ayer una portavoz de CSI.

Los dos sindicatos citados, que han decidido seguir adelante con el «ruido» de las protestas pese a que la junta de personal (el resto de sindicatos mayoritarios) haya optado por bajar la crispación ante lo que consideran una falta de implicación del grueso de trabajadores de Cabueñes, mantenían ayer que «sólo con la colaboración ciudadana se podrá luchar por la sanidad pública, que es lo que queremos todos». De hecho, aseguraban que desde que se pararon las protestas semanales «a las cerca de veinte personas que estaban contratadas por encima de plantilla ya se les ha rescindido el contrato, aunque nosotros seguimos con sobreaforo en las plantas de hospitalización, como en el invierno», exponían. Por eso, consideran que esta situación «que está atravesando Cabueñes requiere dar el do de pecho, y no bajar la guardia. Pero, eso sí, tenemos que ir de la mano de los representantes vecinales y ciudadanos», manifestaban. Los dos sindicatos entienden que el sobreaforo en el hospital gijonés «no es una cuestión puntual de los inviernos, es algo crónico todo el año. Por eso, o somos capaces de organizar el trabajo de una forma racional, analizando las verdaderas necesidades de cada unidad en los distintos momentos del día, o la situación no va a mejorar y la calidad se deteriorará día a día», indicó Ana Carpintero. Los dos sindicatos piensan seguir con las protestas en los próximos meses, con recogida de firmas y otras iniciativas.