Covadonga JIMÉNEZ

La Fundación Prodintec lidera la nueva revolución industrial. Desde este centro tecnológico inaugurado en 2004 en el área empresarial de Cabueñes se promueven tecnologías de vanguardia para el diseño y la producción industrial en Asturias. Su gran reto para este año es el sector de la construcción. «Debe empezar a enarbolar ya la bandera de la innovación», afirma el director general del centro, Jesús Fernández.

El gerente de Prodintec observa que en el momento actual, cuando existen nubes en el horizonte y se habla de un pinchazo en el negocio del ladrillo, tiene sentido desarrollar la capacidad innovadora en las empresas para poder competir en el mercado al tiempo que mejoran la producción.

Los profesionales de este centro tecnológico defienden que la «I+D+i es una inversión que te catapulta al futuro y te diferencia cuando no hay tantas oportunidades». En la próxima feria sectorial de la construcción (Finic), que se celebrará en junio en Gijón, Prodintec presentará algunas tecnologías del mundo de la industria aplicables al sector de la construcción. Citan, por ejemplo, técnicas de prototipado que permiten realizar productos antes de salir al mercado, con poco coste y de manera rápida.

Por su parte, las tecnologías de ingeniería inversa y escaneado tridimensional tendrían aplicación directa en la reforma de edificios históricos y fachadas a través de una parte del original conservada, lo que representa un filón para el negocio de la construcción. Y la visión por cámara de infrarrojos permite observar posibles fallos en una construcción tales como fugas de agua.

Desde este moderno centro tecnológico también quieren acercar a la industria de la construcción técnicas de organización industrial, permitiendo así la racionalización de los procesos de fabricación. «Queremos asegurar que las cosas se hacen bien a la primera. Es fundamental para un producto industrial», afirma Jesús Fernández.

El «Tinte», el taller de innovación tecnológica situado en la planta baja de la sede de la Fundación Prodintec, da forma a todas esas ideas que desarrollan principalmente en un entorno virtual.

La plantilla está integrada por 40 técnicos altamente cualificados que rondan la treintena y dominan dos idiomas la mayoría de ellos. los que trabajan codo con codo con la industria asturiana para inculcarles la importancia de aplicar la I+D+i. La de Prodintec es una plantilla muy motivada que, además, cada seis meses pasa un test sobre motivación en el trabajo basándose en la política de las grandes empresas del conocimiento según la cual el empleado es un cliente más. Creen que el grado de satisfacción de los empleados está directamente relacionado con la rentabilidad de la compañía. Su gran baza es que cada día se enfrentan a un problema nuevo. «No hay dos casos iguales», dice el gerente.

La variedad de ámbitos que cubre les impide estancarse en la tan necesaria tarea de la investigación, desarrollo e innovación. Tienen acuerdos con entidades empresariales de diferentes ámbitos: la Federación Asturiana de Empresarios, la Asociación de Investigación de Industrias Cárnicas de Asturias, Femetal, Saviastur y Aenor, entre otros. Su objetivo es convertirse en un apoyo firme para las empresas que están dando servicios a la industria asturiana. «Para innovar hay que hacerlo desde una perspectiva global», afirma el director general de la Fundación Prodintec.

Y así lo han hecho saber también a la sociedad. En su afán de aportar al mercado expertos en la cadena completa de desarrollo del producto, han puesto en marcha junto con la Universidad de Oviedo el máster en gestión y diseño industrial. Los profesionales de este ámbito observan que la actual oferta académica se centra más en el aspecto técnico que en el proceso integral de diseño. Para los técnicos de Prodintec es fundamental conocer el ciclo completo del producto.