R. GARCÍA

El 78,91 por ciento de los conductores circula demasiado rápido por la avenida de Justo del Castillo. Así lo reflejan los primeros datos conocidos tras la instalación de ocho cajas de radar en las que el Ayuntamiento ha colocado tres dispositivos fijos. Las velocidades registradas se refieren a momentos en los que los radares estaban sin señalizar. Las señales de aviso se colocaron a principios de mayo. El objetivo es controlar la velocidad en las zonas donde los conductores pisan más el acelerador. En este sentido, destaca la avenida Justo del Castillo, donde se han llegado a registrar velocidades de 156 kilómetros por hora en el mes de febrero o los 165 kilómetros por hora registrados en Sanz Crespo. En todas ellas la velocidad límite es de 50.

El Ayuntamiento comenzará a sancionar a los conductores que sobrepasen el límite de velocidad durante la primera semana de junio.