R. VALLE

El Ayuntamiento acaba de completar todo el proceso administrativo necesario para tener a su disposición los terrenos afectados por la construcción del paso subterráneo que unirá los barrios de La Calzada y Tremañes por debajo del actual apeadero ferroviario. Un trámite imprescindible para poner en marcha definitivamente una de las grandes obras que tiene entre manos el área de Urbanismo del Ayuntamiento de Gijón y la inversión más costosa que se realiza a cargo de los fondos del programa Urban. El paso subterráneo que vinculará la calle de Las Industrias (La Calzada) con el camino del Melón (Tremañes) tienen un coste de partida de 4,7 millones de euros.

La concejalía de Coordinación Administrativa y Hacienda acaba de dar su conformidad a los dos expedientes de suelo vinculados a la operación. Por un lado, la entidad pública Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha dado su autorización al Ayuntamiento para ocupar los terrenos de su propiedad en La Calzada. Y por otro, las sociedades Residencial Vegasol y Esnova han adelantado la cesión gratuita al Ayuntamiento de unos terrenos de su propiedad en la zona para la construcción de este paso. Esos terrenos están vinculados a una operación urbanística prevista en el entorno del Camino del Melón, que incluye la construcción de más de un centenar de viviendas y algún elemento de uso comercial o de ocio.

Una vez con los terrenos en poder del Ayuntamiento, sólo falta adjudicar los trabajos para que todos se pongan manos a la obra. Ahora mismo el Ayuntamiento estudia las propuestas de las seis empresas que pasaron la primera prueba de selección de entre las catorce firmas interesadas en la obra. La petición de informes complementarios por parte de los técnicos municipales es la razón de que el proceso se esté ralentizando. Sobre la mesa de trabajo están las ofertas de Aldesa, Hispánica, Vías y Construcciones, Dragados, FCC y Acciona Infraestructuras. El proyecto salía con un presupuesto de contratación de 4,7 millones de euros, pero las ofertas de los candidatos en liza oscilan entre los 3,1 millones de la oferta más barata y los 4,2 millones de la oferta más cara.

El paso salvará la barrera de vías que, desde hace años, separa a los vecinos de Tremañes y La Calzada y que les obliga a usar una pasarela y servirá para construir una vía con dos carriles de circulación y dos aceras para peatones. En principio, la operación se desarrollará durante un año. Se trata de una obra con una especial complejidad ya que se tiene que realizar al tiempo que se mantiene el denso tráfico ferroviario en la zona y se garantiza la seguridad de los miles de usuarios de la estación de La Calzada.