M. CASTRO
El nuevo plan industrial que Factorías Vulcano ha presentado para su filial Factorías Juliana condiciona las nuevas inversiones en el astillero de El Natahoyo a la obtención de subvenciones.
El astillero de Vigo se hizo a finales de 2006 con el antiguo Izar Gijón, privatizado por la SEPI. Vulcano pagó 2,09 millones de euros por Juliana, que cuenta con 84.975 metros cuadrados en propiedad en El Natahoyo. Uno de los aspectos que determinó que la SEPI adjudicara el astillero gijonés a Vulcano frente a otro competidor fue que Vulcano se comprometió a invertir en tres años 13,4 millones de euros en el dragado de la zona de botadura y maniobra de buques y la ampliación de la dársena de armamento de Juliana, necesarios para hacer barcos mayores. No lo ha hecho.
Ahora Vulcano ha excluido nuevas inversiones en el plan industrial 2008-2012, «más allá de las que el nivel de amortización anual permita para emprender las habituales inversiones de reposición. El resto de inversiones deberá ir ajustándose al flujo de caja o a la necesidad que la construcción de un proyecto determinado justifique», señala el documento. El nuevo plan hace esta consideración después de que Juliana acumulara más de 15 millones de euros de pérdidas en 2007 por la obra del primer sísmico para Rieber, tal como publicó este periódico el pasado marzo.
Aunque Vulcano da marcha atrás en el compromiso que adquirió con la SEPI, el plan menciona los 14 millones necesarios para el dragado y las demás obras, pero vinculados al «apoyo institucional que será necesario para poner en práctica este plan».
