A. FERNÁNDEZ

La consejera de Bienestar Social, Pilar Rodríguez, pidió ayer «paciencia» a la población ante lo «complejo y problemático» que resulta poner en marcha la ley de Dependencia. Rodríguez explicó que las dificultades empiezan por entender la propia filosofía de la ley, que, señaló, «ayuda a quien no puede valerse para realizar los quehaceres de la vida diaria». En este sentido, matizó que «no es lo mismo» una invalidez profesional que la dependencia de la ley, que, insistió, «afecta a necesidades básicas para vivir, no cosas como limpiar la casa».

Pilar Rodríguez estuvo ayer en los locales de la UGT de Gijón junto con el director de Prestaciones y Servicios de Proximidad, Paulo González, para informar sobre la puesta en marcha de la ley en Gijón y en Asturias, y para aclarar las dudas del público.

La Consejera reconoció «cierta frustración» en las personas que ya recibían alguna ayuda y que confiaban en mejorar su situación. «No hay mejora porque la ley no es una prestación adicional y excluye a quienes ya tienen ayudas», explicó. En este sentido, precisó que algunas personas que estaban recibiendo ayudas del Ayuntamiento de Gijón «perderán prestaciones» con la ley. «Eso es porque el Ayuntamiento gijonés siempre estuvo muy comprometido con este asunto, pero no sucede así en otros ayuntamientos, que es adonde quiere llegar la ley».

Las inquietudes del público se centraron en el dinero que hay que pagar para recibir los servicios, que, explicó la Consejera, «está en función de los recursos de la persona solicitante. Quien tiene más pagará más, y para quien no tiene nada es gratis». En los mismos términos se manifestó ante la aportación económica que ofrece la ley para contratar a una persona que ayude a la dependiente.

El público pidió «más celeridad» a la hora de realizar las valoraciones que marcarán el grado de ayuda que recibirá la persona dependiente, y reclamó más información sobre el proceso.

En Gijón se presentaron hasta ayer 4.447 solicitudes de un total de 17.104 en Asturias, y fueron valoradas 3.563 por las 13.704 de Asturias. Del total de solicitudes que fueron validadas, el 55 por ciento corresponde al grado 3 (gran dependencia) y el 12 por ciento al grado 2 (dependencia severa). Paulo González precisó que ambos grados, que suman el 67 por ciento del total de solicitudes, tienen derecho a recibir las prestaciones este mismo año. «Nuestra intención es que quienes solicitaron la ayuda en 2007, bien sea en servicios o en prestación económica, empiecen a disfrutarla antes del verano».

Entre todas las solicitudes se hicieron, en Gijón, 2.014 proyectos individuales de asistencia, por los 5.852 del total. La mayor parte de estos proyectos, 1.143 en Gijón y 4.398 en Asturias, es para recibir alguno de los servicios que estipula la ley, y el resto (378 en Gijón y 1.454 en Asturias), para recibir una aportación económica.