M. C.

Las secciones sindicales de UGT y CC OO en Naval Gijón, que cuentan con la mayoría del comité de empresa, han cuestionado el plan para incorporar a 44 excedentes del astillero de Poniente a Factorías Juliana, debido a que discrepan de los niveles laborales que les ofrece Juliana, astillero controlado por el empresario gallego Fernando Santodomingo Azpeitia, accionista mayoritario de Factorías Vulcano, que es la empresa matriz de Juliana.

La dirección de Juliana, las federaciones del metal en Asturias de UGT y CC OO, las secciones sindicales de ambos en Naval Gijón y la dirección de Pequeños y Medianos Astilleros Sociedad de Reconversión (Pymar, que gestiona Naval Gijón) mantuvieron el pasado viernes una reunión en la sede de FADE en Oviedo. La reunión se prolongó durante poco más de media hora, debido a que los representantes sindicales de Naval Gijón rechazaron de plano la propuesta de incorporaciones a Juliana, al considerar que esta empresa no respetaba las categorías de los 44 trabajadores que quiere incorporar, los cuales no se podrán prejubilar de Naval Gijón cuando ésta cierre.

Este escollo podrá solucionarse en reuniones futuras, indicaron representantes sindicales, que dieron más importancia a otro problema: lograr financiación para ejecutar el último plan industrial que presentó Factorías Juliana, que incluye la prejubilación de gran parte de su propia plantilla. Los sindicatos y la empresa tratan de lograr que las administraciones públicas paguen el coste de esas prejubilaciones. Además, Juliana también quiere lograr un préstamo participativo de la SEPI por 16 millones de euros para enjugar las pérdidas millonarias que declaró en el ejercicio 2007 y las que prevé tener en 2008.

El plan industrial también vincula la ejecución de las inversiones que Vulcano se había comprometido a hacer en Gijón a que las costeen las administraciones públicas, lo que supondría otra ayuda de 14 millones de euros.