M. IGLESIAS

Una mirada retrospectiva a las grandes obras literarias de autores asturianos que, en ocasiones, quedan en el olvido. Como un intento de que permanezcan, se muestren y disfruten ha nacido la exposición «Palabras libres, palabres llibres: la poesía en Asturias desde 1978», organizada por la Dirección de Promoción Cultural y Política Lingüística de la Consejería de Cultura y Turismo, a través de la Biblioteca Pública Jovellanos, lugar en donde se puede ver la muestra hasta el próximo 1 de junio. A partir del 5 de junio la muestra se traslada a la biblioteca ovetense Ramón Pérez de Ayala, en la que permanecerá hasta el 6 de julio.

El comisario de la exposición y periodista de LA NUEVA ESPAÑA José Luis Argüelles ha sido el encargado de seleccionar, de entre todas las voces de la lírica asturiana, los 96 nombres que mejor la representan. En palabras de la directora general de Promoción Cultural y Política Lingüística, Consuelo Vega, «esta exposición es, por lo tanto, un acercamiento necesariamente selectivo a la poesía asturiana desde la transición hasta nuestros días, también un homenaje a los escritores de las generaciones recientes que nos sitúan con su obra en un lugar privilegiado en el contexto español».

El trabajo bibliográfico realizado para la ocasión es inmenso, de esta forma se pueden ver en la biblioteca obras de autores que hablan de Asturias y no necesariamente son asturianos, así como escritores asturianos que no hablan de la región. «Sólo a partir de los años del cambio político hay una multiplicación de autores, grupos poéticos, tertulias y revistas que constituyen una mixtura de voces y ecos que llega hasta nuestros días y es merecedora de atención y elogio», explica Argüelles, quien ha realizado una extensa labor documental en un recorrido que comienza en 1978 y dura hasta nuestros días.

Según el comisario, éstas «son fechas que nos permiten, con algunos pequeños ajustes, un ejercicio de memoria con el que recordar algunos de los caminos y sendas por los que ha transitado la poesía asturiana en estos últimos 30 años». Por ello, José Luis Argüelles considera que «es una primera propuesta, un primer acercamiento que debería tener continuidad con nuevas calas en ese material editorial si queremos ser exhaustivos y dejar completa la topografía de un importante territorio en el que podemos encontrar algunas de las mejores páginas de nuestra reciente historia literaria».

Uno de los períodos destacados del florecimiento de la poesía asturiana fue lo que se conoció como el «Surdimientu», que se traduce en «una inquietud creciente por la situación del asturiano y, al mismo, tiempo la de catalizar el deseo de renovación y ruptura con la literatura tópica y agónica», cuenta el periodista. Es decir, un movimiento de resurgir de la literatura escrita en asturiano. Por ello, y por todas las muestras literarias que ha generado la poesía asturiana ha crecido esta exposición de autores que «sin complejos, atentos a lo que se publica en otras partes, ponen en marcha iniciativas de gran calidad en algunos casos, modestas en otros, que generan un caldo de cultivo para proyectos más ambiciosos», añade.