Raquel NOGUEIRA

La bravura de la mar y los tonos azulados y grisáceos de las marinas de la pintora gijonesa María Antonieta Laviada han sido sustituidos por cumbres y picos en «Montaña Nevada (Picos), Asturias». Este óleo sobre tabla es la obra ganadora del primer premio memorial «Carlos de Haës» en el Concurso nacional de pintura naturalista Picos de Europa, que será recogido por la artista el próximo miércoles. El premio se entregará en el Gran Hotel Pelayo de Covadonga, donde se encuentran expuestas al público las obras de la asturiana y el resto de participantes.

María Antonieta Laviada realizó su primera exposición en 1971 y desde entonces no ha parado. Ha mostrado sus obras en galerías y museos de toda España, especialmente en Asturias, y de Francia. Actualmente trabaja en las piezas de su próxima exposición en Oviedo, «donde hacía mucho que no exponía», explica.

La pintora gijonesa confiesa que su amor por el arte «es vocacional» y que «ya desde pequeña dibujaba todo lo que se me ponía delante». La inspiración para plasmar sus paisajes en las tablas «la consigo observando todo lo que me rodea», confiesa. Es una artista autodidacta que nunca ha tomado clases particulares ni ha estudiado Bellas Artes. «Lo más que hice fue pintar un tiempo junto a mi tío, el pintor César González Pola. Y decía que tenía mucho talento», comenta.