Las fiestas de Santiago Apóstol en Ceares concluyeron ayer con la entrega del tradicional bollo preñáu y botella de vino a sus socios -como puede verse en la imagen-. Al popular encuentro entre vecinos le siguió una gran verbena amenizada por la orquesta «Juan Mallo». No fueron los únicos actos del día. La lectura del conxuro alrededor de la queimada sirvió como fin de fiesta a cuatro intensos días de festejos en el parque de Los Pericones.